Dejar de jugar es lo más fácil que hay. Es más fácil que respirar, más fácil que hacer jugo Tang. Creo que si hicieran la lista de las mil cosas más fáciles, dejar de jugar al fútbol estaría tercera, después de “hacerse la paja” y de “ganarle una discusión a Brancatelli”. Y la verdad es que no extrañaba ni en pedo jugar, tengo el tobillo más operado que el Bati, no veo la hora de colgar los botines y quedarme viendo televisión en musculosa y slip cagado.
Rodolfo Arruabarrena: “Me preocupa el rendimiento colectivo”
Me preocupa el caso Nisman, pasaron varios meses y Fein tiene menos resolución que la primera tele de tubo que llegó a la Argentina. Me preocupa la inflación, el otro día me cobraron ochenta pesos un Flyn Paff sabor uva. Me preocupa la inseguridad, a un primo mío lo asaltaron con un serrucho y le robaron un tatuaje. Me preocupa la educación de los jóvenes, el pibe Pavón me dijo que lo habían tenido que sacar en “comilla”, cuando en realidad se lo llevaron en una camilla. Me preocupa el hambre en el Chaco. Bah, el hambre en el Chaco no tanto. Pero, ¿que me preocupe el rendimiento colectivo? ¿Qué es eso? ¿Cómo funciona el Plusmar doble piso que nos lleva a todos los partidos? ¡No me jodan! El rendimiento colectivo me importa menos que al Diego saber cuántos hijos no reconocidos tiene.
Edgardo Bauza: “Había que jugar un partido inteligente, lo hicimos y se ganó. Ahora tenemos un finde tranquilos”
Inteligente fue el pendejo Mark Zuckerberg que a los 31 años se baña en dólares. Inteligente es el representante de Maxi López. Inteligentes fueron los planteos de Mourinho al Barcelona. Inteligente es Skip. Nosotros le ganamos por la mínima diferencia a los burros de Quilmes dirigidos por el mediocre de Falcioni, es como ganarle los 100 metros con vallas a Gabriela Michetti. Y por “tenemos un finde tranquilos” debe entenderse “nos vamos a encerrar a ponerla y a jugar a la Play 4”.
Pedro Troglio: “Ganar este partido fue buenísimo: contra un gran equipo y en su cancha. Creo que hicimos un muy buen juego”
Decirle “gran equipo” a Belgrano es como decirle, “gran banda” a Tan Biónica o “gran periodista” a Luis Majul. Nosotros le ganamos a un equipito de cuarta que está más inflado que los giles de Gran Hermano. Ah, y lo de “muy buen juego” era joda. Perdí una apuesta con Bilardo y tenía que decir una boludez de esas. Si perdía él tenía que decir "Es gatorei, señorita", en el brindis del cumpleaños de 15 de una de mis hijas.
Sebastián Saja: “Teníamos mucha ilusión, pero anímicamente estamos bien. Salimos a ganar y nos llevamos una victoria que muy valiosa”.
Estoy absolutamente destrozado, hecho mierda. Los pibes están todos deprimidos. El otro día, Pillud se puso a llorar porque quería que volviera Teo y nos cueteara a todos. Brian Fernández se quiso suicidar tomando un litro de Manaos sin respirar. Milito intentó ahorcarse con un cinturón de Cahais, pero no apretaba. La victoria contra Aldosivi nos importa menos que la salud de Cristina U. ¿A quién le interesa ganarle a un club que tiene como símbolo un pescadito en su escudo y en su cancha hay olor a merluza? De la única “Libertadores” que estamos cerca, es de la cancha sin terminar de los conchudos de Independiente.