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Fiel a su historia que sabe de sufrimiento, esta semana va a ser un Vía Crucis para toda la masa sabalera. Algunos ya lo empezamos a transitar en el mismo momento en que terminó el partido en Pergamino. Va a ser una semana dura, con los nervios a flor de piel, crispados. Para ningún hincha de Colón esta va a ser una semana fácil, donde en otras circunstancias estaríamos esperando el feriado para ir de pesca, o tomar algún barril, que abundan por estas fechas.
Colón va a jugar un partido decisivo, al límite de la cornisa. Llegamos a esta última fecha ascendiendo pero con posibilidades de quedarnos afuera, si es que no se consigue un resultado: ganar.
Y eso que en otro momento del campeonato parecía casi descontado jugando de local, hoy genera incógnitas, demasiadas.
Como ya vengo diciendo hace unas semanas, hay jugadores que la camiseta de Colón le queda demasiado grande. Hay muchos integrantes de este plantel que, una vez que se retiren van a poner la camiseta de Colón en su vidriera, exhibiéndola como el club más importante donde jugaron, no tengo dudas.
Dentro de este mismo campeonato, se puede decir que hubo varios “Colones”: el que te llevaba por delante de local, el que salía a empatar, el que te mataba de contragolpe, el que cayó frente a rivales que iban último o no peleaban absolutamente por nada.
El armado de este plantel fue, desde el principio, totalmente desparejo en cuanto a sus variantes futbolísticas, y sin supervisión absolutamente de nadie, excepto del DT, y acá me quiero detener.
Es inadmisible que, en el día de hoy, con todo lo que pasamos y aprendimos del desastre de dirigencia anterior, que lo único que hacía era negocios con jugadores que venían sin importar jerarquía ni absolutamente nada, a nadie se le haya ocurrido crear la función de Manager de Fútbol. Del descalabro que tomaron estos dirigentes, es increíble que no haya UNO que proponga delegarle la parte futbolística (refuerzos, pretemporada, etc) a alguien cercano a ellos y que ayude al DT, a través del conocimiento, a armar un plantel. No hablo de un dictador, si no de alguien que recomponga las bases futboleras de a poco, y que hable de los errores que se puedan cometer en el primer equipo con el técnico en nombre de los dirigentes, seguramente incapaces de hacerlos por ellos mismos, o por lo menos eso demostraron.
No se qué hubiera pasado si estaba Ferraro, si estaba Saralegui, no sé, pero por lo menos en ese caso, la dirigencia tendría una voz cercana a ellos y al DT que los mantenga informados de la cotidianeidad del plantel. Sugiero esto porque, aún a riesgo de lo que pueda ocurrir el próximo fin de semana, habrá que reconocer que el hincha de Colón recibió otro cachetazo en cuanto a poner la confianza en un grupo de personas para dirigir el club. La misión no era sencilla, seguro, pero se habrían ahorrado un trabajo grande y enfocarse en otros problemas más urgentes.
Convoco a todo el pueblo sabalero a reventar el estadio de papeles, globos y colorido para demostrarle a quien todavía no haya entendido, que de esta situación salimos todos juntos o no sale nadie, que a este barco lo salvamos NOSOTROS y no alguien en particular, que la ilusión de todo el pueblo sabalero de volver al lugar de donde nunca tendría que haber salido vale más que un puñado de billetes, que los jugadores se van a ir y que muchos tienen que estar agradecidos de haber vestido esta rojinegra que les queda tan grande.
VAMOS POR LA GLORIA, ES AHORA O NUNCA!!!
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO SABALERO - @Piguyi2011
