NOVEDADES

25 noviembre 2014

¿FIN DE UN CICLO? - EL AURINEGRO


25 noviembre 2014

Olimpo sigue naufragando entre la incertidumbre de un equipo que no sabe a qué juega. Es tan frágil que se desmorona ante los primeros ataques de pibes que recién comenzaron a forjarse en primera. No deja de sorprender, y para mal. Cuando tenían todo para salir de la mediocridad ya obsoleta de ésta campaña lamentable. Ni con los pibes de Central pudieron, ¿entendés lo que digo?

Mientras tanto, los aplaudidores oficialistas siguen tirando tierra debajo de la alfombra. Pero ojo, porque en esta humilde columna no pretendo atacar las opiniones ajenas, sino defender las propias. Defenderlas a base de fundamentos. Y cuando hablo de fundamentos me refiero a dos hechos puntuales: el juego y los resultados.

Si de juego hablamos, me sería tan fácil analizarlo que podría desarrollarlo en unas pocas líneas. Olimpo no juega a nada. Es un equipo básico, sin alma, sin corazón ni orgullo propio. Incapaz de arrinconar en un arco a unos pibes que recién empiezan a asomar. Y eso, discúlpeme querido lector, es culpa pura y exclusivamente del entrenador.

¿Cómo no va a ser un equipo básico? Si le dan la responsabilidad a Adrián Martínez para que sea el encargado de llevar la pelotita al área rival (bastante hace). Si Olivares juega becado durante setenta minutos paseando por la cancha. Si cada partido, constantemente, pensamos en nuestro arco. Si Villanueva y Sills no se acoplan a los movimientos ofensivos y se pierden en los defensivos. Si Furios pierde la marca ante la primera pelota que cae en el área. Si se pretende que dos colombianos, que no sabemos de dónde vienen, nos saquen a flote. Si ante todo esto, Perazzo no tiene la personalidad que debe tener un entrenador para pegar un grito, un reto, o lo que fuese. Si no mete un cambio como la gente. Si se queda sentado sin decir absolutamente nada. Pregunto: ¿no le hierven los glóbulos rojos al ver que su equipo no tiene alma, carácter ni personalidad? Es fácil, el equipo transmite en la cancha lo que el técnico le transmite a ellos.

Hemos tocado fondo futbolísticamente, ver un equipo así cansa y desmotiva. Walter Perazzo debería ser el primero en no mirar al costado, levantar la mano y asumir su responsabilidad. Pero nada de eso pasa, y su obsesión con sus planteos tácticos y ciertos jugadores lo ha condenado.

Creo y considero estupendos los proyectos de Alfredo Dagna, pero no a cualquier costo. Es hora de buscar otro punto en el horizonte que nos permita encontrar un Olimpo que contagie, pero sobre todo, que se anime a buscar otro protagonismo.

Por eso quiero que nuestro presidente entienda, y ya lo he dicho antes, que Olimpo esta por sobre cualquier nombre.

Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO AURINEGRO - @joaquincamicia
Share This :
 

Top