Ya no hablando de merecimientos y yendo a la realidad, si tenés más de siete chances claras de gol y no convertís, algo malo hay. Mismo que nos llegan una vez y la pelota termina adentro. A Salcedo lo banco a muerte pero está en un nivel lastimoso. Está bien, seamos buenos entre nosotros, el paraguayo no hizo pretemporada, especuló con lo de Cerro Porteño y así está hoy en día. Mismo Domingo, otro que arrancó sin la pretemporada y de apoco va queriendo la cosa. Bertolo no hizo la pretemporada tampoco. Pero en este aspecto fue —o fueron— más pillos, porque esperando el transfer se mandó una mini pretemporada hasta que lo habiliten. Hoy, gracias a eso, es uno de los mejores jugadores junto a Erviti. El tema de Servio es para un psicoanalista. Puede salvar la bocha más difícil pero las más boludas terminan adentro. Cuando sos arquero y arrancás con la escuelita, las primeras indicaciones que te dan son dos: El área chica y el palo son del arquero. Cosa que Servio últimamente está descuidando más que esta Comisión Directiva a la comunicación.
Y hablando de la comunicación o de la incomunicación ¿Se acuerdan de la época Portelista donde todos se quejaban la falta de comunicación? Ha vuelto. Cazares volvió todo roto de Ecuador. Nadie salió a aclarar nada. Se viene una gran movida a nivel juveniles, desde reserva para abajo ¿Salieron a informar algo? Tampoco. Se viene un Scouting de juveniles a cargo de Claudio Vivas. Un negocio redondo para todos, salvo para el club claro. Pero nadie dice nada. Pero claro, estamos todos sedados con el “buen juego” de Almeyda que algunas cuestiones importantes se escapan. Todos están enterados de los penales que no le cobraron a Banfield contra Racing. En el club vecino, cuando pasa algo así salen a llorar en manada desde el entrenador hasta el último vocal. Acá Spinosa y Almeyda salieron a decir que fueron cosas del fútbol. Somos muy distintos con los vecinos, está claro, pero salir a decir eso para quedar bien en los tiempos que corren nos dejan como unos boludos. No pido que Spinosa y el resto salgan a llorar como Andrea del Boca. Pero hay que marcar la cancha. “El que no llora no mama y el que no roba es un gil”. Repito, me encanta quedar como un caballero del fair play. Pero en este futbol argentino corrupto hasta la medula, eso es quedar como un boludo, lamentablemente. Hoy si criticás sos un antibanfield amigo de Portell, yo estoy sumamente agradecido con muchas cosas pero tampoco hay que caer en la obsecuencia y en el chupaculismo. Primero esta Banfield, después el resto.
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO TALADRO - @Yuainjaim
