¿Hasta cuándo? La temperatura en Buenos Aires, 35 grados. Cuatro goles se morfo Servio. Cuatro. El dólar se va a 20 pesos. Cinco goles ya se comió Servio. Spinosa hambrea a su perro. Vuelve Duhalde a Banfield. Siete ya son los goles boludos que se comió Servio. En cualquier momento nos descuentan los seis puntos por lo de De Souza. Estamos últimos en el promedio. Últimos. Trece ya son los goles que se morfo Servio. Otro periodista golpeado por Servio. Falta de libertad de prensa en Banfield. Vuelve Portell, la oposición está reuniéndose en secreto con Portell, Neurus y Soraya la mala de María la del barrio. Veinticinco ya son los goles que se fumó boludamente Servio. Otro periodista golpeado. Domingo no para a nadie. Duhalde recorre el predio para venderlo. Otro gol que se come Servio. Lanús tiene el doble de puntos, Independiente que ascendió de lástima, también. ¿Hasta cuándo?
Es recordado el segmento de “¿Hasta Cuándo?” en el programa radial “Lucy en el cielo con Capusottos” del genial comediante homónimo. Si usted no lo recuerda, se lo comento brevemente: Era una parodia en donde se repetía al hartazgo lo mal que estábamos. Describiendo un caos total, repitiendo cada cinco segundos una cifra de muertos que iba en elevación.
En Banfield está pasando lo mismo, pero lamentablemente no es ninguna parodia. Oficialismo y oposición se están matando. Puntualmente Servio le pego a un periodista del medio “Soy de Banfield”. Guido Cichello —Que también cubre o cubría a Defensa y Justicia— por una nota que el arquero suplente considero agraviante. Si bien la nota era en sí bastante dura, la había redactado otro periodista —pero estaba sin firma— pero Servio le dio al primero que vio de Soy de Banfield. No apaño ni justifico la violencia y lo que hizo Servio es completamente reprobable y condenable. Así como también es completamente condenable el uso político que le dieron desde esa página —a cargo de Viñuales— como también desde NotiBanfield y Código Banfield. Todos medios portelistas, hoy reagrupando a la vieja armada.
Con la actual conducción no somos el Bayern Münich, tampoco somos Muñiz. Pero cada error en esta gestión se agranda como si fuese una mancha de aceite en una camisa. Tampoco todo es color de rosas, pero es una gestión que tiene dos años y levantó un muerto importante. La anterior gestión duró 14 años, también nos dio alegrías, un campeonato, clasificaciones a las copas. Pero institucionalmente fue un desastre. No todo es blanco o negro. No todo es K o anti K. En Banfield nunca todos tiraron para el mismo lado en los últimos 25 años. Ahora hay otra vez una interna —ooootra vez peronista— donde Banfield está en el medio ¿Hasta Cuándo?
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO TALADRO - @Yuainjaim