15 de abril.
Repito: 15 y de abril. La niña bonita, casi tan bonita como la gloriosa casaca rojiblanca, como la imagen maravillosa de las tribunas saltando al compás de mi corazón en un canto hermanado con miles de otros corazones, que nunca se cansan de saltar o de latir, Uniónicamente Plena, compás de vida.
Así que cual Pascua profana, elevare mi copa en la medianoche para renovar ese fuego sagrado , mi pequeño y personal (pero compartido con miles de hermanos Tatengues) alfa y omega, por otro año en el que poco importarán las venturas o desventuras, los éxitos o fracasos, lo ganado o lo perdido, porque en definitiva, se renueva la pasión, el sentimiento, ese ente indescriptible que hará que en ese mismo momento de levantar mi copa mis ojos se enturbien de emoción plagados de imágenes sentidas, reales e imaginadas, y desde el pecho ese calorcito que les contaba explote en mi garganta para gritar, en comunión, mi frase de guerra santa: ¨DALE UNION¨.
Todo esto pasará en esta fecha fundacional, en la que en la casa de unos tales Baragiola, comenzaba a gestarse este sentimiento hecho club nunca mejor nombrado: CLUB ATLETICO UNION. Por añadidura, de Santa Fe.
Lo demás, es puro cuento. Ya lo saben todos aquellos que me acompañaran y a los que acompañaré en vigilia expectante. ¿De qué? Solo de ganas de compartirnos la alegría de ser, de pertenecer. Qué es eso lo que trascenderá en definitiva. Como debe ser.
ADELANTADO TATENGUE - @adelantadoUnion