No hay derecho del visitante a poner 12 o 13 defensores y plantear un partido horrible desde lo anímico, donde el monólogo de llegadas del local es constante y a medida que pasa el tiempo, la impotencia crece. Y como si fuera poco, si no la embocamos ni en el arco iris, la esperanza de transponer la línea de meta con la globa es solo eso, esperanza. Y parece más fácil atrapar un duende al final del arcoíris que decir… hoy ganamos por más de tres goles, por ejemplo.
Aunque miro la tabla, la tablita, y veo que solo ocho puntos separan al glorioso UNION es Santa Fe del último puesto de ascenso. Y ascender es la meta, como si fuéramos pálidas reencarnaciones de Newery. Es lo único que importa. Así que vale, vale, como dirían los españoles, ganar a como de lugar. Y se ganó. Con o sin derecho. A otra cosa mariposa, a pensar para adelante, a rezarle a san gol y enderezar la mira de los ¿goleadores? del tate y ya rapidito rapidito, como polvito de adolescente, a pensar en el próximo encuentro.
Ahora, por el bien de mi bobo, si van a ganar no lo dejen para el último segundo del partido. Esa película ya la vi.
P.D: Fuerza a Madelon, que sufrió una desgracia familiar.
P.D.2: el básquet tatengue ganó merecidamente, el único equipo de básquet de la ciudad enorgulleciendo a Santa Fe.
ADELANTADO TATENGUE - @adelantadoUnion