Estimados, no les voy a decir nada nuevo. Todos sabemos que estamos en una situación más que delicada y, para colmo, no vemos una solución a corto plazo. A todos nos pone mal y a nadie le gusta en la situación en la que estamos. Ya lejos quedó el primer partido contra Godoy Cruz en que cantábamos y saltábamos. Ahora estamos haciendo cuentas sin parar, viendo los partidos de los otros para ver si pierden, etc.,  etc.  En fin, estamos sufriendo más de lo que disfrutamos este JUEGO (si, remarco la palabra juego. Esto es lo que es, nada más). 

Ahora, estoy muy cansado de esta situación y encima de bancarme los miles de comentarios de salames que se creen que tienen la razón. Es muy fácil empezar a criticar cuando las cosas van mal. Estoy harto de escuchar (o leer) “Caruso es mejor técnico”, “Tal jugador es un muerto”, “pongan al que está en la reserva”. ¡Basta!. Algunos lo pedían a Cano, le atajan un mano a mano y ahora se tiene  que ir a la reserva otra vez. ¡Basta! Dejemos de criticar y empecemos a hacer cosas para cambiar. Y si no podemos hacer nada no tiremos más leña. Ya estamos mal, ¿para qué empeorar? ¿Qué se gana cuando uno remarca las cosas que salen mal? Nada. ¿Por qué nos creemos con derecho de decir que tal jugador es un muerto? Gente este deporte tiene más años que vos y yo y, desde mucho antes, se sabe que cuando el equipo va mal, “el que está en el banco es mejor”.  

Así que, basta de insultar. Vamos a alentar. Estamos mal y el fixture no nos ayuda en nada (los partidos que tenemos que ganar están al final y hay que meter una seguidilla de 4 o 5 al hilo). Entonces, ¿Para qué tirarle tierra al muerto? Si de verdad tenemos esa audacia, lo que tenemos que hacer es alentar sin parar a los 11 que salen a la cancha y, por sobre todas las cosas, alentar al técnico que los elige. Cuando empecemos por hacer eso, las cosas van a empezar a cambiar. Mientras sigamos siendo los mismos salames que prefieren al que no está jugando, si nos jactamos de conocedores del fútbol al decir “yo no lo hubiese puesto a fulano porque es horrible” una vez que terminó el partido, la cosa no va a cambiar.