Porque nació en cuna pincha, desde la época de Zubeldía con el corner con pierna cambiada al primer poste, donde un jugador la peinaba mientras que otro definía en el segundo palo. Por los cabezazos de Verón al Manchester, Brown a Vélez, Alayes a Arsenal y Boselli a Cruzeiro, goles bañados en gloria.
Porque es trabajo, es estrategia, es laboratorio, es práctica. Es una variante más del juego que debe ser entrenada. Porque te sirve para abrir partidos cerrados, para lastimar a equipos más poderosos, para generar peligro desde la distancia. Porque a través de ella el balón va a estar más cerca del arco rival, más cerca del gol.
Porque con ella engañamos a los rivales con movimientos coordinados, rompemos la lógica de los lugares establecidos. Por las cortinas, por los desmarques, por las luchas cuerpo a cuerpo, por ganar la posición, por llegar primero a la pelota. Por esos centros punzantes al corazón del área. Porque siempre fue ninguneada, bastardeada por los líricos de turno, asociada al antifútbol, a lo feo, a lo burdo, a lo fortuito.
Porque Estudiantes tiene el deber de practicarla. Porque es un arma que heredamos de los más prestigiosos ancestros albirrojos y fallar en ataque o en defensa sería un deshonor. Porque hay que respetar nuestra idiosincrasia, nuestros valores que nos hacen únicos.
Por ese gol de Silva. Porque ganarle así a Arsenal fue hermoso. Fue volver a las fuentes, fue reencontrarse con ese ADN que por momentos parece perdido.
Por eso y mucho más, no me vengan con fulbito, no me vengan con tacos, caños ni firuletes. A mí denme estos partidos, estos partidos en que los jugadores te hacen sentir identificado. Porque son estos partidos en los que te das cuenta, más que nunca, lo que significa para un pincharrata... la pelota parada.
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO PINCHA - Dr. Bidón