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05 febrero 2014

EL NUEVO FÚTBOL PARA TODOS


05 febrero 2014

05 DE FEBRERO DE 2022. En el día de ayer se confirmó que, tras ocho años de diferentes experimentos para televisar nuestro querido fútbol, volverá el anhelado y querido Fútbol Para Todos. Eso no es todo: el Jefe de Gabinete Gino Renni aseguró que tanto Marcelo Araujo como Julio Ricardo fueron sacados con vida del nosocomio psicoasistencial Borda y se harán cargo del proyecto. Ya no será necesario intentar explicarles a tus pibes que había un relator que se equivocaba más que Horangel, ni que existía un comentarista que estaba físicamente en un estadio pero comentaba un partido que se disputaba en otro terreno. En Un Metro Adelantado repasaremos algunos de los experimentos por los cuales pasó nuestro fútbol en estos años.

En 2014, el hoy CEO de la Standard Oil, Sir Marcelo Hugo Tinelli, se encargó de tomar las riendas de la televisación de los partidos para darle un tinte menos político a las transmisiones. Con las presencias de Mariano Closs, Juan Pablo Varsky y Sebastián Vignolo, el fútbol volvió a ser sólo un espectáculo. El primer torneo fue un verdadero éxito, pero para el segundo tramo del año Tinelli se engolosinó. Puso a extras que se reían tras cada yerro de Guille Burdisso, a José María haciendo el jugo loco con las aguas de los bancos de suplentes, y a Mariano Iúdica agitando a las hinchadas y gritando su famoso “Daaale” cada vez que el arquero iba a sacar de meta. Además, se supo que Leo, tuvo serios inconvenientes mientras le hacía el sketch del “Panadero” a Caranta. El arquero de Central jamás entendió que se trataba de una joda para Tinelli.

Tras las críticas del mundo futbolero, Marcelo se desligó del negocio. En su lugar, y queriendo continuar con la línea de hacer del fútbol un espectáculo, Julio Grondona pensó en Flavio Mendoza. No hizo falta mucho para convencer al coreógrafo de formar parte de un mundo rodeado de hombres. Entonces, bajo su tutela, se puso en marcha el proyecto “Fútbol para trolos”. La idea fue brillante: en el entretiempo, cada equipo debería bailar un tema a elección y quienes mejor lo hicieran, ganarían ese partido. Los términos “coreografía”, “puesta en escena” y “vestuario” reemplazaron rápidamente a “línea de 3”, “enganche” y “tener la pelota” en las charlas futboleras. Más de una hinchada pidió la cabeza del vestuarista, algo impensado años atrás. El problema de esos torneos fue que Boca los ganaba de principio a fin. El equipo xeneize corría con ventaja, ya que hacía diez años que los hacían bailar domingo tras domingo.

Luego de tres torneos sin que Boca pierda un duelo, el público perdió interés en el fútbol. Fue el final del Fútbol para trolos. Desde entonces, el mandamás de la AFA buscó dejar el tutú rosa y las brillantinas de lado y volver a las fuentes. Para ello, decidió darle lugar a grandes figuras del fútbol, ofreciéndoles comentar y relatar los partidos.

El elegido para hacerse cargo de la gerencia general fue Carlos Bianchi, que había sido despedido de Boca luego de probar a Erbes en el único puesto que le faltaba: como arquero. Aquella tarde los xeneizes cayeron 8 a 2 ante Deportivo Español y al vapuleado DT lo colgaron de los rulos en el Puente Avellaneda. Para la nueva aventura televisiva, el Virrey pensó en gente de confianza, que tenga experiencia en reconocer jugadores por los números en la camiseta. Entonces, no dudó en llamar a Chiqui Pérez para los relatos y Matías Caruzzo en los comentarios. Las transmisiones se hicieron lentas y faltas de conceptos básicos. Como consecuencia, varios sponsors decidieron dejar de auspiciar a la incipiente pareja de relatores. Como cuando jugaban, Pérez y Caruzzo recaían en una vieja costumbre: perder las marcas. Para colmo, la escenografía que los acompañaba se rompió en 17 de las 19 fechas: era evidente que Bianchi y los ex futbolistas mantenían sus antiguos problemas en el fondo.

En 2020, Bianchi renunció porque una cámara oculta de Facundo Pastor develó que los domingos se la pasaba durmiendo la siesta en lugar de mirar las insoportables transmisiones a cargo de sus ex dirigidos. Llegó el turno de Alejandro Sabella, quien para los relatos acercó a un futbolista retirado desde el Mundial 2002: Juan Sebastián Veron. El ex volante del Manchester tuvo varios problemas con el relato. Por ejemplo, demoraba 20 minutos en relatar cada vez que había un lateral. El punto de quiebre fue cuando un 2 de abril, en el medio de una transmisión, reivindicó la soberanía inglesa sobre las Islas Malvinas. Esto derivó en que el relator Javier Vicente, quien se encontraba en la cabina de al lado, lo increpara al grito de “¡pirata hijo de puta, con la patria no se jode!”. Terminaron agarrándose a golpes de puño y del relato de ese partido entre Platense y la CAI se hizo cargo Claudio Spontón, que era el comentarista invitado.

Tras este escándalo, Verón fue declarado Sir por la Reina Isabel, y Sabella fue echado por Grondona, que, rápidamente, atravesó la capital en su helicóptero y planeó la fuga de Marcelo Araujo y Julio Ricardo del Borda para ofrecerles nuevamente un cargo que nunca deberían haber dejado: la (des)coordinación periodística de FPT. El operativo fue un éxito rotundo y se espera que hoy por la tarde ambos se hagan cargo del Nuevo Fútbol para Todos. ¡Desde Un Metro Adelantado les deseamos la mejor de las suertes a estos dos locos lindos en este nuevo proyecto!

ADELANTADO DEL TIEMPO
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