NOVEDADES

16 octubre 2013

MOSTAZA CHARLA CON DIOS


16 octubre 2013

Dios: ¡Uy! ¿Atiendo? Sí, a ver si son de la producción de Mirtha y me invitan de una vez... ¡Hola!

Mostaza: ¡Hola! Llamo para hablar con Dios, ¿está?

Dios: Me voy a fijar, ¿de parte?

Mostaza: Mostaza.

Dios: No, gracias. El otro día bajé para ir al Burger y le puse una savora que todavía estoy repitiendo. ¿De parte de quién?

Mostaza: Soy Reinaldo Carlos Merlo. Me dicen Mostaza. Dirijo a Racing.

Dios: ¡Qué hacés, querido! ¿Otra vez dirigís a Racing? Eso es más difícil que hacer Romeo y Julieta en el San Martín con Cristian "U" y Karina Jelinek de pareja protagónica.

Mostaza: ¿Usted sabe quién soy?

Dios: Claro, a vos te hice el milagro más grande que recuerde. Está al mismo nivel de la resurrección de mi pibe.

Mostaza: No me reste mérito. Yo puse lo mío...

Dios: Obvio. Los cuernitos fueron fundamentales. Pero eso está relacionado con la contra, viste. 

Mostaza: No sea así, tuvimos que enfrentar adversidades, era muy difícil...

Dios: Mirá, Mostaza, seamos claros. Después del equipo de José, mi plan era que Racing no saliera campeón nunca más, ¿sabés?

Mostaza: ¿Y qué pasó?

Dios: El tema fue así. Mi sueño era ir a lo de Mirtha Legrand, la admiraba desde que era chiquito. Y pensé que si sacaba campeón a su querido Racing iba a estar más cerca. Pero no. Encima después de eso se fue al carajo todo.

Mostaza: ¿En serio?

Dios: Claro. El orden del universo es una cosa muy frágil. Todo estaba perfectamente previsto, pero ese 2001 decidí cambiar y... me equivoqué. Por sacar campeón a Racing se cayeron 2 torres en Estados Unidos, la Argentina entró en el caos total. Provoqué que un radical tomara una decisión, la decisión de irse, pero una decisión al fin. Nunca más tuerzo el rumbo de la historia.

Mostaza: Entonces, los goles de Milito, las atajadas de Campagnuolo...

Dios: Todo, Mostaza. Hasta las termeadas del Chanchi. Ahora decime, ¿por qué te metiste otra vez en ese quilombo?

Mostaza: Es que me gustan los desafíos.

Dios: ¡Entonces escalá el Himalaya! O salí a correr en pantaloncito rosa por La Cava a las 12 de la noche. O reprochále una expulsión a Teo Gutiérrez.

Mostaza: Es que Racing es como una novia. Me dio mucho y yo le di mucho también.

Dios: Y sí, los novios son así, no se cansan de darse. Pero después de un tiempo se les pasa. Y vuelven a mirar porno en internet y a calentarse con cualquiera por inbox.

Mostaza: Puede ser, pero lo que viví en Racing fue único.

Dios: ¡Más vale! La única vez que ganaste un título, la única vez que no te peleaste con algún jugador, la única vez que atacaste, la única vez que no te echaron a patadas.

Mostaza: Yo no soy conflictivo.

Dios: No sé, pero te volteó Gallardo. ¡Es como que el cantante de Airbag te haga un golpe de Estado!

Mostaza: Es que hay manejos del fútbol que me molestan. Ante todo, los códigos.

Dios: ¡Ni que fueras abogado!

Mostaza: Es que así somos los muchachos de la Raya.

Dios: ¿Qué tiene que ver el Diego con esto?

Mostaza: La Raya es el lugar donde nos juntamos con el Coco Basile, Pagani y otros amigos...

Dios: ¡Qué mesita, amigo! ¿Cuál es el trago del lugar? ¿Batido de arena con clavos? Digo, porque tienen cada vocecita ustedes...

Mostaza: Somos gente curtida por los años, las experiencias...

Dios: Las tinturas, los implantes...

Mostaza: Pero Señor, llevamos un rato charlando y no me preguntó ni cómo conseguí su teléfono ni qué necesito.

Dios: Mirá, el teléfono te lo dio el Coco, ya lo sé. Cómo te creés que ganó todo con Boca y dirigió ¡2! veces a la Selección sin entrenar, meta verso.

Mostaza: Sí, me lo dio él. Aunque no es tan así como dice Usted. Él también es un laburante.

Dios: Pará, Mostaza, que si me río mucho me tira la ciática...  Claro, vos ponés "laburante" en wikipedia y sale la foto de alguno de ustedes. Dale.

Mostaza: Bueno, Señor. Yo lo llamé para pedirle ayuda con Racing. Lo necesita, está al borde del precipicio.

Dios: A ver, nene. Eso es precisamente Racing. Para eso lo creé. Los hice ganar unos campeonatos para que después el dolor fuera más intenso, y para que tuvieran un pasado mítico en el que apoyar su fe. Los campeonatos de los 50, el equipo de José, el tuyo, dentro de siglos serán como el éxodo, como los milagros de mi hijo... Miles seguirán creyendo pero muchos también discutirán su existencia.

Mostaza: ¿Entonces no me va a ayudar?

Dios: Si en el 2001 fue ese quilombo, ¿te imaginás lo que sería ahora?

Mostaza: ¿Para tanto?

Dios: Otra vez caos, andá a saber, por ahí el terrorismo baja la torre Eiffel y la de Pisa, Argentina volvería al 1 a 1, Rial sería Ministro de Educación... No, no puedo ser tan irresponsable, disculpáme.

Mostaza: ¿Entonces qué hago?

Dios: Renunciá. Si es tu onda últimamente.

Mostaza: Yo me quiero quedar. Tíreme una punta, al menos. ¿Qué hago con el plantel?

Dios: Camoranesi y Regueiro están grandes, los podés sacrificar y vender la carne a una fábrica de panchos que conozco en Avellaneda, es cerca y podés sacar unos mangos. Y a los pibes poneles un cepo en el pito, así guardan un poco de piernas para jugar.

Mostaza: Yo pensaba trabajar la comunicación con los más jóvenes.

Dios: Dalo por hecho. Acá tengo un motorola espectacular. Te bajás el whatsapp y listo.

Mostaza: Quiero ver a Racing campeón.

Dios: Hubieras empezado por ahí, todavía tengo la revista de Olé, te la regalo. Está firmada por Maceratesi.

Mostaza: No se burle más, Señor, ¿qué debo hacer?

Dios: No sufras, que eso te hace más de Racing todavía. Pensá que esto va a durar un par de meses hasta que se aviven de nuevo. Y después te relajás. El bronce no te lo quita nadie.

Mostaza: Es cierto. Me quedo con eso.

Dios: Sí, y con toda la que puedas cobrar en estos meses. Porque mirá que es Racing, agarrá todo lo que te den porque no sabés cuando va a quebrar, eh.

Mostaza: Lo voy a tener en cuenta, gracias igual.

Dios: De nada, y te dejo porque viene la Chiqui. Tengo su expediente listo pero no me la voy a traer hasta que me invite. ¡Chau, querido! ¡Que yo te ayude!


Share This :
 

Top