Cuando todo parecía indicar que jugamos un mal partido, revisé en detalle cada minuto y me encontré con que merecimos mucho más. Cuando todo me indicaba que no ligábamos absolutamente nada, Tigre dio vuelta el partido ante Arsenal en Victoria. Cuando yo ya imaginaba que la derrota sería muy dura, me encuentro con que seguimos punteros en soledad y por tres puntos.
Es difícil decir que Newell’s no fue el de siempre si uno mira bien el partido. Además, yo vi a un rival que todos los medios decían que iba a salir a ganar, que iba a jugar al ataque y terminó esperándonos en mitad de cancha de local. Terminamos el primer tiempo perdiendo porque Guzmán no estuvo fino en el primer pase. Nos fuimos al descanso sin ganar porque, habiendo llegado de manera clara al arco rival, no concretamos lo suficiente.
En el segundo tiempo, me pareció ver a un equipo colgado del travesaño de local, dejando a un media punta para liquidarlo de contra. También noté a un Newell’s falto de ideas, que tropezaba con sus propias intenciones y contra los zagueros locales. Vi a una lepra desesperada, que sabía antes del partido que si metía el primer gol, goleaba, pero nunca estuvo al frente, y si algo nos cuesta a nosotros es empatar los partidos.
En general, yo vi a un equipo que jugó al fútbol y otro que hizo tiempo de local. Me pareció que jugábamos contra Atlanta por momentos. Pero está bien, no podíamos esperar otra cosa, fueron los medios los que me hicieron creer que el partido iba a ser abierto, la realidad es que ascendieron hace poco y están luchando por quedarse. Y bueno, puede pasar, de hecho hemos perdido contra Arsenal y All Boys en el campeonato pasado. Siempre que nos hacen esos planteos, nos complican.
No podemos dejarnos carcomer la mente por una derrota, hay que levantar rápido la cabeza. El torneo nos ve aún bien arriba, insuperables por el momento. Si logramos mantener el nivel de juego y agregarle más precisión en los lanzamientos largos, nos va a ir muy bien. Si a eso también le añadimos menos errores defensivos, ¡agárrense, porteños!
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO LEPROSO
