Muchas veces para analizar sirve comparar. Hagámoslo. Pizzi llegó empezado el Torneo Inicial del 2012, para reemplazar a Caruso. Caruso, a su vez, había llegado a mitad de la temporada anterior para suceder a Madelón. Entonces, ya el hecho de que Pizzi haya terminado la temporada sentado en el banco de suplente muestra un progreso. Pero no sólo eso, sino que se le renovó el contrato por dos años. Dos años en el contexto del fútbol argentino es un plan a largo plazo. Es decir que con este DT pasamos de apagar incendios a planear objetivos a uno/dos años.
¿Cómo fue que se logró este cambio? Principalmente con resultados. Todo se subordina a esto, seamos realistas. Pizzi consiguió más puntos que los entrenadores de los 4 o 5 últimos años (58% de efectividad). Tantos puntos que engrosamos significativamente el promedio y clasificamos a la Sudamericana. Después veremos cómo se ganaron esos puntos. Pero lo que primero importa es ganar. Por eso se dudó de su continuidad tras las derrotas con Boca el año pasado y con Racing este año, y no por haber sacado del equipo titular a Buffa, por no poner al Pipi ni por separar a Aguiar (por citar ejemplos de decisiones poco simpáticas).
Analizando cómo se lograron esos puntos, vemos que fueron muchas victorias y empates y pocas derrotas (13-13-4). Conclusión: el equipo de Pizzi juega a ganar los partidos. Es así. San Lorenzo salió a buscar los partidos contra todos los rivales, de local y visitante. Esta es la actitud que queremos los hinchas para el equipo. Y, en vista de los resultados, la mejor opción para ganar. Pidió a Cetto para reforzar la defensa y consolidar ese sector, para luego centrarse en el mayor déficit que tenía el equipo: la generación ofensiva.
Gran parte de la mejora en ataque fue con jugadores de inferiores. Refutó absolutamente la creencia que en inferiores no había valores interesantes. Pizzi apostó a los pibes y le salió bien. Y mejor le salió al club que revalorizó su patrimonio y descartó jugadores traídos que no servían. Ojalá que Correa, Verón, Villalba, etc., sean los nuevos Romagnoli, Ervitti, Barrientos.
Estamos a más de dos semanas del comienzo de la temporada y ya contamos con todos los elementos para trabajar y preparar el equipo de la mejor manera. Los refuerzos llegaron rápido y son de nivel. Los lesionados se recuperaron. Todo está dado para que el técnico arme un lindo equipo. Así que trabajo y trabajo, Pizzi. Que es para lo que está y lo que le gusta. Ni más, ni menos.
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO CUERVO
