Trezeguet: Hola, ¿hablo con el Señor?
Dios: ¿De parte?
Trezeguet: Trezeguet.
Dios: ¡Gastoncito! ¿Cómo andás, tanto tiempo? ¡Qué programa ese Gran Hermano! Nada que ver con los que vinieron después... ¿La seguís viendo a Tamara?
Trezeguet: Creo que está confundido, Señor. Yo no me llamo Gastón, me llamo David. David Trezeguet.
Dios: Ah, sí, te confundí con otro muchacho de la tele, no importa. Ahora te ubico. ¿Quién te dio mi número? Antes lo tenían un par de personas, pero últimamente me llama cualquiera. Es más fácil comunicarse conmigo que escaparse a la marca del Chiqui Pérez.
Trezeguet: Lo tengo desde hace tiempo. Me lo pasaron en Francia y lo perdí. Después me lo volvieron a dar en Turín.
Dios: Bueno pero en ese equipo de la Juve tenían los teléfonos de todos los árbitros, además. A mí no me llamaron nunca. No tienen ni una escucha mía, eh, yo no tuve nada que ver.
Trezeguet: Bueno, Señor, pero yo lo llamaba por otra cosa.
Dios: Ya me imagino, querés que River salga campeón. Pero no puedo, pibe. Ya lo saqué el año pasado. Tuve que hacer malabares para que Central pierda los últimos tres partidos.
Trezeguet: No Señor, es otra cosa. Me dejaron libre de River. Ramón Díaz me borró.
Dios: Pero hombre, ¿vos seguías jugando? Pensé que te habías retirado.
Trezeguet: Me estaba recuperando de una lesión en la rodilla...
Dios: Pero es eterna esa lesión, debés tener el Síndrome Milito. ¿Por qué no probás con ir al médico?
Trezeguet: Fui, Señor. Ahora estoy mejor. Mi deseo es retirarme...
Dios: Bueno, ya era hora. Estás grande.
Trezeguet: ... en River... retirarme en River, Señor. Pero será en otro club. Hay ofertas, quería consultarle.
Dios: A ver, dejáme adivinar... ¿Alguna liga exótica de Asia? ¿Algún magnate ruso que lava guita? ¿Algún millonario excéntrico que te quiera llevar a su programa de baile?
Trezeguet: Bueno... a priori tenía ofertas para ir a Banfield...
Dios: Vos me estás jodiendo. ¿Banfield? ¿Con el Pelado bajón de técnico?
Trezeguet: Pero el Taladro puede ser un lindo desafío...
Dios: ¡Pero si serás sensible, che! Lindo desafío era salir campeón del mundo con Francia! ¡O ganar la Champions! ¡Juntar el décimo millón es un lindo desafío! O a lo sumo tirarse del trampolín en Celebrity Splash. Pero pelear un ascenso, no.
Trezeguet: Con River fue inolvidable.
Dios: ¡Qué piola! Eso fue un paseo. River iba a ascender hasta con Polino de DT. Pero Banfield es más jodido, eh. Van cien, los medios no te dan bola y los árbitros no están todos a favor. Además, no siempre vas a tener a Funes Mori de compañero , mirá si te ponen a competir con un delantero que juega al fútbol y terminás de suplente...
Trezeguet: Bueno, también me llamaron de Platense, el club que me vio nacer.
Dios: ¡Y del que te tomaste el palo a los 3 partidos! Te puteó hasta Fabbri aquella vez. ¿Te olvidaste?
Trezeguet: No, pero ahora me tienta tratar de subir...
Dios: David. A esta altura no da que te corra Telmo en la isla Maciel... O parar una bocha en la cancha de Comu y que te la afane un topo.
Trezeguet: Pero vio cómo es la frase, "hay cosas del corazón que la razón no entiende"...
Dios: Mirá, para el corazón está el cardiólogo. Esto es negocio. Si en Platense pasás dos partidos sin meterla te van a gritar que devuelvas la guita, guita que encima no vas a cobrar nunca.
Trezeguet: Bueno, pero hay cosas que el dinero no puede comprar.
Dios: Escucháme, David. Eso es el slogan de una publicidad sobre guita. Hacer esa publicidad salió guita. Ponerla en el aire también salió guita. Y encima, promociona una forma de financiar guita. ¿Entendés cómo es la torta? No seas ingenuo. Te voy a decir una frase y grabátela bien: "La guita no hace la felicidad, pero es preferible llorar en una Ferrari".
Trezeguet: ¿Entonces?
Dios: Yo que vos agarro un club de esos donde la podés juntar con impunidad. Así como las ballenas van a morir a la playa, los futbolistas de nombre mueren en el desierto... Total, está el jeque que no entiende una goma de fútbol y si no hacés goles siempre le podés echar la culpa a tus compañeros locales... Imagináte, allá hasta se aguantaron al Diego de DT una temporada entera.
Trezeguet: Pero señor, no me gusta eso, no quiero terminar en Asia.
Dios: Está bien, es una manera de decir. También está la Major League Soccer, ahí Bieler hace goles, Valeri pide la pelota...
Trezeguet: Es que no tengo ofertas de ahí.
Dios: Bueno, pero ¿para qué está Dios? Yo te consigo un pase ahí, sería cuestión de arreglar.
Trezeguet: Bueno, le agradecería mucho si se ocupara...
Dios: Sí bueno, SERÍA CUESTIÓN DE ARREGLAR. Ejem.
Trezeguet: No sé si entiendo...
Dios: Y... yo te consigo club, pero tendrías que dejar el 15%, sabés. Acá en el cielo estamos con reformas y nos vendría bien un poco de... capital.
Trezeguet: ¿Se puede mandar plata al Cielo?
Dios: Clarooo. ¿Cómo te pensás que vivimos acá? No nos alimentamos con aire. Un porcentaje del diezmo siempre viene para arriba.
Trezeguet: ¿Y cómo hago para enviarle?
Dios: Es muy sencillo. Vas a cualquier BaPro o Pago Fácil y listo. Después te paso el número de cuenta para que deposites.
Trezeguet: Bueno, gracias Señor, le agradezco mucho. Pero ojo que no estoy en mi plenitud física...
Dios: No te preocupes, David. Allá el fútbol es lo de menos. Y aviváte, el corazón sirve para bombear sangre, para estas cosas se usa la cabeza.
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