MAL PRESAGIO
Una nueva presentación de la Selección Argentina y finalmente sucedió lo que se venía presagiando en este espacio futbolero menotista que entiende de pases cortos y de buen gusto: El equipo de Sabella no pudo ganar sin contar con Lionel Messi.
Como en cada partido, se evidencia una carencia de estructura, de funcionamiento sólido. ¿Cómo llegó Argentina hasta aquí? Con una defensa endeble, que a menudo deja más dudas que certezas, con un mediocampo totalmente desequilibrado, con un extraño doble cinco tirado a la derecha y un Di María que es casi un delantero, y tres delanteros arriba que habitualmente solucionan todo individualmente.
Bueno, esta vez, frente a Colombia, no aconteció eso. Sin la estrella del Barcelona, nuestro bilardista entrenador se inclinó hacia su sistema preferido: 4-4-2, y allí perdió explosión y, sobre todo, generación de juego en los últimos metros.
Esto es un simple adelanto de lo que desde aquí venimos pronosticando desde que empezó el ciclo del entrenador platense. La Selección está encontrando la defensa de a poco, pero tiene serios inconvenientes de funcionamiento en la mitad y en los últimos metros, inconvenientes que se disimulan cuando el 10 agarra la pelotita, gambetea un par y la clava al ángulo.
El tema es, ¿qué sucederá cuando juguemos contra un combinado serio, leasé Brasil, Alemania, Holanda o España? ¿También podrá Lío seguir contrastando los desequilibrios que hay detrás de él? ¿Y en caso que no esté presente el capitán, podremos trascender de la medianía?
No nos engañemos muchachos, a este equipo le falta estructura, le falta un funcionamiento aceitado. Por citar un ejemplo, con la última España campeona del mundo, ¿no les daba la sensación que entraba cualquiera y podría jugar dentro de ese idea o identidad firme que no dependía exclusivamente de un tipo?
Acá tenemos esta bipolaridad peligrosa y que seguramente no conduzca a destinos exitosos: Cuando está Messi, el equipo tiene piezas desordenadas pero llega a la victoria gracias a su destaque personal; y cuando no está el 10, somos un equipo más, mediocre, tibio, que puede llegar a empatar de local contra una limitada Colombia que no mostró absolutamente nada.
Así estamos, vamos a clasificar, obvio, ¿y después? ¿Cuando nos agarre un seleccionado serio? Esta película ya la vi...
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO MENOTISTA
