Es clásico que te ganemos, Boca. Es clásico que vengas al Nuevo Gasómetro y te vayas sin nada. Es clásico que esos tres puntos por torneo los sume el Ciclón. Ahí está lo clásico del asunto, lo típico, lo característico, lo que no escapa a lo tradicional, como bien lo indica su definición.

Pero me pregunto, ¿a qué viniste el sábado, Boca? Viniste a pasear y eso terminaste haciendo. Querías salir a bailar y no te aguantaste hasta la noche. Porque viniste con un equipo amateur, indigno. Ningún hincha del futbol merece ver a esa bolsa de papas que tenés de número 2 jugando al fútbol. Una violación al campo de juego es eso. Y tu mejor tiro al arco fue el penal, imaginaste. No, así no. No se sobra de esa manera porque puede pasar lo que pasó. Todos los que estábamos el sábado en la cancha queríamos ver un partido entre pares, entre semejantes y te venís con esos (representados) jugadores que eligió (el hijo de) tu DT. Te habrá servido contra las gallinas… ¡Son gallinas, Boca! En fin, seguí jugando los miércoles. Para mí ese torneo lo ganás…

Con mucha comodidad, el Ciclón volvió a ganar de local y metió por primera vez en el torneo dos victorias al hilo. Con esta mini racha de diez puntos sobre doce, nos vamos acomodando en aguas calmas. Más cerca de la Sudamericana que del Rojo. Logramos que al juego lo acompañen los resultados. Esos resultados que llegan metiendo goles y fue hasta que Pizzi no se avivó que Jara y Straqualursi tenían que salir del equipo para darle lugar a los pibes, que éstos no llegaron.

Así San Lorenzo hoy tiene un equipo que suple las inseguridades del arquero con seguridades defensivas (muy bien Gentiletti de central); con un mediocampo que ayuda en la defensa y también va al ataque (Buffa abanderado); y una delantera de pibes rápidos que desbordan y llegan al gol. Esta interesante combinación es lo que permite que estemos tranquilos, mirando a lo bueno que puede venir y no a lo malo de lo que hay que zafar, para decirlo de una manera rebuscada.

Para el futuro próximo algunas buenas noticias: queda limpio de amarillas el Pichi Mercier, el Pipi sigue sumando minutos, Pablito quedó en libertad… Bah, bueno, esa última… No estoy muy seguro cómo tomar eso, no sea cosa que vuelva a tomarse licencia de 40 días.

Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO CUERVO