Así es caballeros. Debemos detenernos en este punto y en un hecho al final del encuentro.

¿De este lado? El equipo del Colorá. Ese que tildan algunos de mufa. Ese que venía de comerse un baile con la hermana de Cenicienta en el quince de abril, dejando más dudas que nunca. Ese al que la hinchada alienta permanentemente, llevando una multitud a copar la Bombonera. Ese equipo donde se vio la mano del Colorá para realizar OCHO cambios respecto al último partido, con un esquema táctico que seguro repitieron como escolares los muchachos toda la semana. Que venia de punto, a jugar contra Boca, el estadio, el periodismo y la terna arbitral.

Del otro lado, Boca, con su soberbia elevada al punto de preparar todo para que el gordito ese vuelva como un héroe contra el último de todos, el más humilde, el vapuleado durante 26 fechas por todos y todas. Con serpentinas y cartelitos alusivos…

¿Y cómo salió la cosa? Les pegamos un zaino de novela, para decirlo en criollo. Lectura táctica ejemplar del Colorá, y cada uno de los jugadores con la confianza renovada, jugándose la vida, jugando para adelante, comiéndose y borrando de la cancha al rival, al gordito ese, a las tribunas, a los carteles. Callando al periodista porteño que vio como vaca miope como un equipo que sabía a que jugaba se comía la cancha, al celular de Dios, a los plateístas que se fueron, al frío, a la cana que nos trató como delincuentes, etc. Y eso que la cancha estuvo inclinada por el hombre de verde, que si no UNION ES SANTA FE se llevaba un resultado más abultado. Y ahí me quiero detener… ¡¡ Franzoia estaba habilitado!! Miopes, cobardes, no hacia falta tanta ayuda, no hacían falta cuatro minutos de descuento. No hacia falta tanta tonga.

Igual lo ganamos. Así es. Ganamos el primero de espero muchos, para seguir luchando, para seguir sintiendo que se puede. El equipo se encontró a sí mismo, se ve que el psicólogo amigote del Colorá esta trabajando.

A otra cosa mariposa. A seguir de esta manera. Ahora a reventar las tribunas en casa, para confirmar que el romance entre este equipo y la hinchada no será un amor de verano. Los que no fueron titulares, a jugar para ganarse el lugar, los que fueron, a confirmar el por qué.

Por otra parte, el gordito ese se negó a darle la camiseta a un pibe que lo borró de la cancha. Se ve que estaba mal pobre, se le van a secar los sanguches. Eso no se hace, varón.

PD1: la hinchada demostró que aquí y ahora, UNION ES SANTA FE.

PD2: Se vienen todos los chicos, creo que va a salir un lindo partido, y nos verá gananciosos.

PD3: si alguien lo ve a Sava, le quiero pedir un favor: el teléfono del psicólogo, debe ser una eminencia.