Sin embargo, la fragilidad del equipo se hizo sentir en el partido. Ni bien Arsenal hizo el primer gol, los brazos de los jugadores se cayeron. Volvimos a ser ese equipo apático que estaba desde el comienzo de la temporada, cuando todavía estaba Astrada.
Schurrer, desde que llegó,
no pudo levantar un equipo que venía mal y el final llegó. Si bien el ciclo del 4-2-3-1 o del 4-5-1
finalizó (por el bien de Argentinos y del fútbol, el sistema planteado es
asqueroso, se llegaba a ¾ de cancha y después que Dios nos ayude.), la pregunta
del título viene ya que el ciclo de tener un equipo apático y sin ganas empezó
con Astrada y todavía no se terminó. Argentinos no necesita un técnico revolucionario ni con ideas
extravagantes. Necesita una persona que le levante el ánimo y la moral a un
equipo que hace agua en esa parte. Parece ser que nadie puede hacernos levantar
la cabeza. Cualquiera que venga (o mejor dicho, cualquier técnico que elijamos)
tiene que hacer hincapié en la parte anímica por sobre todas las cosas.
Ahora nos toca ir a Mendoza,
pero parece que ese partido está muy lejos. Antes, tenemos que arreglar problemas
internos… Antes tenemos que traer a alguien que nos levante el espíritu… Ojalá
que esta vez decidamos bien, por el bien de Argentinos…
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO BICHO