Siempre digo que Huracán es
especial, es distinto. Que el globo es un club que no se parece a ninguno y que
sus particularidades lo hacen pintoresco, atractivo, grande y sufrido… muy
sufrido.
Una de las particularidades más
sobresalientes del club es la puta habilidad de perder todos los partidos que
hay que ganar. Ya sé, que en el ideal
hay que ganar todos, pero estoy hablando de esos partidos que son
encrucijadas, los encuentros bisagra.
Esos, Huracán los pierde todos, diría sin excepción.
Ahora bien, ¿cuántos de esos
partidos tenes por torneo? ¿5, 6, el 15
por ciento? Bueno, Huracán de entrada, ya los perdió. Después tenes los
partidos “ganables”, pero el globo también los pierde. Incluso pierde los partidos
que son “empates clavados”. Entonces, ¿cuál es la solución? No tengo ni la más
puta idea… más podrido que la moral de Luis Ventura.
El partido de ayer había que
ganarlo, como había que ganar el de la semana anterior. Perdimos los dos y esto
ya no se trata de mala suerte, malos arbitrajes o un castigo divino. Tengo la
firme convicción de que el técnico y los jugadores tienen el pecho más frio que
Walt Disney. Que no laburan, que no tienen ideas, que no son pillos y que
además les falta coraje.
Todas las frases hechas de una
tribuna cuajan perfectamente para estos jugadores “no dan tres pases seguidos”,
“solo tiran pelotazos”, “no se les cae una idea”, “están mal parados”, “son de
madera” y eternos etc que habitualmente se tiran al boleo, pero que en el globo
pintan una postal del mismo infierno.
Para terminar, viendo los extraños
planteos del DT y el frio que les corre por las bolas a los futbolistas, creo
que es primordial encontrar una manera de sumar puntos para evitar tener algún
tipo de complicación (mayor) con el promedio. Por si les interesa, mi abuela
teje bastante bien, le puedo pedir que vaya haciendo varios de los gorritos de
la foto...
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO QUEMERO