"Entrá y atajate todo, aunque des rebotes como loco. No pasa nada"... El partido estaba por empezar y Palermo hablaba con Ibáñez, ya había pasado por casi todo el plantel y le faltaba dar un par más de indicaciones. "No Salinas, a vos después te tiro la frase cuando estés por entrar, hay que meterle mística viejo, bancá hasta el cambio". El sol de nuestro Cuyo decía presente, mientras el calor descosía a un público que, con timidez, empezaba a ocupar su lugar alrededor del campo de juego.
"Entrá y partilo a Alemán"... El equipo ya pisaba el verde césped y el pibe Insúa, tras recibir esta orden del DT y dudar un instante, siguió al resto de sus compañeros. Las indicaciones estaban dadas, faltaba que arrancara el match.
Errores, errores y más errores se sumaron a una sobredosis de "purohuevo", en un partido con casi tantas ocasiones de gol como jugadores en la cancha. Nos enfrentamos tal vez al peor equipo de la división y sufrimos como perros. No importaron los apellidos, ni Castellani ni Castro (a pesar de que este último hizo un gol y tuvo varias buenas) zafaron de cargar con un buen par de errores; ni hablar de Castillón y sus mano-a-mano desperdiciados, de la defensa frágil que tenemos e incluso de nuestro tan preciado "Pochito" Insúa que, fiel a las indicaciones del DT, decidió fusilar a Alemán y partir con una roja directa.
Aún así nunca se bajaron los brazos y la representación más fiel de esto la dan los integrantes de la dupla delantera que, con sus limitaciones como goleadores, no dudan en dejar todo en la cancha. La verdad que aparte de ser un bajón para nosotros los hinchas, ya me pone mal por ellos dos ¿Se imaginan la frustración con la que carga Mauro a esta altura?...
El encuentro estaba complicado, faltaba precisión y más que precisión, faltaba inteligencia (Mago volvé pronto). Hubieron minutos a puro pelotazo y minutos en los que nos empezamos a meter en nuestro propio arco, la mano venía jodida... Pero de un momento a otro se avivó el Titán: "Che, capaz que Ledesma por izquierda no, vamos a poner al nuevo. Y... ¿Si meto a Cooper que tiene la velocidad y la "viveza" que nos está faltando? Si, y también lo voy a poner al Potro.
"Entrá y definilo"... Las palabras del DT entran por los oídos del delantero, patean el tímpano hasta abrirse camino a la corteza y en cuestión de segundos están inundando las fibras de ese tipo que, con un 16 en la espalda, viene a vengarse del tiempo que no hizo más que obligarlo a quedarse entre las sombras del plantel. Con esa adrenalina dando vueltas, corren los minutos hasta que la testa del jugador se estrella en una pelota enviada por el "Pana". La redonda se desvía a la izquierda y no para hasta pasar entre los tres palos, dándole la espalda a un tal Perafán. Hasta ese momento nuestras gargantas estuvieron intactas. Hasta ese momento... Porque sabíamos que el partido y los 3 puntos por fin eran nuestros. Porque el aire nunca se disfruta tanto como cuando te estás ahogando.
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO TOMBA