Sí comegato, aflojale al felino doméstico que por estas horas debés estar sintiendo el aliento del pirata que viene viento en popa y te pisa los talones. Teniendo como base el huevo y ser por mucho el equipo más aguerrido y ordenado del país, el de Alberdi está arriba en el torneo, y por estos días se baraja entre los candidatos. Es cierto, no gustamos ni mucho menos hacemos "jogo bonito" pero somos lejos el hueso más duro de roer. Logramos el objetivo faltando seis fechas y ahora no tenemos nada que perder y todo por ganar.
Hablando de fútbol, abriendo la fecha Belgrano salía a visitar (?) al alicaído Atlético Rafaela. Como de costumbre partido friccionado y feo como pisar mierda descalzo, debido a las reducidas dimensiones del campo de juego; no había lugar para hacer otra cosa que el pelotazo por lo que el balón estaba más en el aire que en los pies de alguno. Luego en 5 minutos cambió todo; no se que le picó al Picante, ni a Fontanini o a Abal, la cuestión que en el juego, uno menos para cada equipo y a partir de ahí el encuentro no fue el mismo.
Belgrano se hizo más fuerte, y se lo vio mejor preparado para afrontar lo que se venía al quedar 10 contra 10, principalmente por la tranquilidad que el entrenador transmite a sus dirigidos. El celeste encontró primero los espacios, aprovechó la contra, los regalos, y hasta se animó a marcar un golazo con claros toques y de altísima calidad de sus volantes más defensivos (Farré y Teté), que culminó en el segundo de Velázquez. Un pincelazo de lo que este equipo puede hacer, y que a partir de lograr los 25 puntos tan ansiados por Zielinski, deberíamos poner en práctica ya no para consolidar nuestra permanencia sino para apuntar al campeonato.
No es una locura pensar en un título, Arsenal con no mucho más en el juego, y con el 1% de nuestra hinchada se consagró en el anterior certamen. El celeste está entero moral y físicamente, tiene una afición envidiable que copa en todos lados, que rebalsa de local "y que alienta los 90 sin parar". Belgrano hoy se presenta como "el cuco" del torneo, el rival más molesto, el más difícil, el que más hace transpirar y terminar con los tobillos más hinchados. Sumado a que no hay equipos imbatibles y lo parejo del torneo, la ilusión no puede ser esquiva para el pueblo pirata. Muchos hace rato que conviven con ella, algunos se están sumando recién ahora y otros que prefirieron evadirla, ya hoy les debe ser insostenible aunque se sigan pronunciando con mesura. Esto es así, es lo que se genera en las tribunas, oficinas, escuelas, facultades, hospitales, clínicas, y en todo lugar.Transciende el concreto del Gigante y vive con el hincha, que no elige sino que siente. Le recuerda a la voluntad que no es la que manda sino que es esta pasión, la que aflora desde lo profundo del ser, quien lleva las riendas de la ilusión, y pelear contra ella no sólo es inútil sino imposible.
Por eso estimado/a pirata, soñar todavía no cuesta nada, y aproveche, porque nunca se sabe que medidas adoptará la yegua (las misma que ahora nos da el "fútbol para tapar todo"). Trate de imaginar consecuencias, no se agote en hechos.
Lleve su imaginación un poco más allá y visualice no sólo la vuelta olímpica sino también los problemas que va a tener la fábrica de Lotto cuando se agote a las pocas horas de salir a la venta, la remera 2013 con la primera estrella bordada en nuestro escudo ó las cantidad de bebés que nacidos a partir de diciembre del 2012 se llamarán "Ricardo", "Juan Carlos", "César", "Guillermo", "Lucas", o alguno de los nombres de los gladiadores del plantel. Para soñar, hay que hacerlo en grande.
Ahh, y si tiene un amigo gallina, resuelva cuentas, charle profundo, comparta un fernet y demás. Pero dele un abrazo fuerte también, porque por un tiempo no lo va a ver más.
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO PIRATA
