Otra vez lunes, otra vez una victoria que sirve para prenderse en la lucha. Como decía una semana atrás, la mano del director técnico está más visible que nunca. Vuelvo a recalcar las actuaciones de Pizarro y Romero, resistidos por mí hasta el hartazgo, que con buenas actuaciones van despacito tapándonos la boca a todos los hinchas granates. 

Lanús se muestra como un equipo combativo de mitad de cancha hacia atrás y muy rápido hacia delante, la solidaridad de cada uno de sus jugadores acerca al equipo a la tan deseada y necesaria regularidad del fútbol argentino. Días atrás me pregunté si estaba tan mal pensar que podíamos ganar siete partidos seguidos y hoy me pregunto si podemos ganar seis.

El partido fue todo del granate, el planteo mezquino expuesto por el rival le facilitó las cosas en defensa, porque siempre defendió en superioridad numérica. En la mitad de la cancha, cada partido que pasa “el polaco” es cada vez más importante y Pizarro cada vez más criterioso al momento de jugar. Si bien hoy “el increíble” Pereyra no tuvo uno de sus mejores partidos con el balón, siempre está bien predispuesto para ayudar en el trabajo sucio. Ayala es cada vez más sólido, y Romero y Regueiro siguen haciendo de las suyas. Vale acalar que todo esto lo facilitó un tímido Independiente que nunca supo cómo jugar el partido. ¡Que nos importa si nosotros sí supimos qué hacer y cómo hacerlo! El primer gol llegó una vez más por una guapeada de esas que Mario ya nos tiene acostumbrados, que le puso todos los tapones a la vista a Tula para que el rebote le quede a Romero, que con un gran gesto técnico eludió al arquero rival y definió con el arco vacío.

Ya en el segundo tiempo, con un hombre más, fue todo mucho más fácil. Lanús se plantó aún mejor en el medio campo y empezó a despilfarrar situaciones, yo diría que por momentos hasta hubo displicencia por parte de nuestros jugadores. Ya con “el mago” Valeri en cancha, que logró inmediatamente hacerse amo de la pelota, el equipo se hizo ancho y profundo. Se seguían generando situaciones hasta que otra vez Mario, sí, como si por sus venas corriera la sangre de Obdulio Varela, volvió a guapear y le sirvió el gol a Castillejos. Treinta y cinco minutos y partido liquidado.

La realidad marca que nos encontramos a cuatro puntos del puntero. El equipo se encuentra en uno de sus mejores momentos y encontrando esos resultados que hace muy poco tiempo atrás nos eran esquivos. Como no recordar que en el apertura 2007 tuvimos dos partidos seguidos de locales contra Tigre y San Martín de San Juan en las últimas fechas, ¿casualidades? Seguramente. Aunque yo ya estoy empezando a sentir ese hormigueo en el estómago vaticinando un final de novela. Les pido que por favor me dejen seguir soñando y que nadie hasta la fecha 19 se atreva a despertarme. Es momento que nosotros desde nuestro lugar, empecemos a jugar un papel más que importante y el domingo ¡¡¡reventemos la fortaleza!!!

P.D.: Sabella Fritzler es argentino!!!

Por lo menos así lo siento yo.

ADELANTADO GRANATE