En eso estamos convirtiendo nuevamente a nuestro hermoso estadio. Haciéndole honor a su apodo, un reducto difícil para cualquiera, hasta el único puntero se llevó mucho de arriba en su visita a ella. Es una lástima haber dejado tantos puntos de visitante, porque viendo este presente y la solidez que tenemos en casa, habiendo ganado alguno más afuera hoy nos tendría enredados en el pelotón de arriba y no merodeando la mitad de tabla. Pero la realidad marca hoy, que tenemos catorce puntos y nos encontramos en la décima posición esperando encontrar la tan ansiada regularidad.

El partido contra los pechos de Santa Fé arrancó parejo.

Si bien nos fuimos ganando al descanso, ellos tuvieron alguna que otra situación para convertirnos. La causa fue que la defensa granate, en especial Vizcarrondo, daba muchas ventajas a la hora de marcar. Pasó igual con Marchesín, para mí arquero indiscutido de selección, que también dudó más de la cuenta. Pero Lanús es Lanús y en casa no perdona. La primera que tuvo Romero definió de manera exquisita para poner el marcador uno a cero, vale recalcar que la jugada viene de un corte de Pizarro y un pase Valeriano del uruguayo Pereyra que no está de más decir que cada día que pasa juega mejor. Ya en el segundo tiempo con el tanteador a favor, el equipo se asentó y el mediocampo empezó a recuperar más y los laterales granates empezaron a tomar protagonismo entrando más en juego. Cabe mencionar el gran partido que hizo Balbi luego de tanto tiempo, lo de Araujo ya es cada vez más seguido. Regueiro, como se lo extraña al negro cuando no juega, siempre generando peligro con su picardía, ganando tiros libres y aportando siempre con gol. En fin, al equipo se lo ve de a poco cada vez más sólido y solidario. Todos marcan, todos corren, todos juegan. Esta vez después de mucho tiempo se ve un equipo compacto y seguro de lo que hace.

Se viene fecha FIFA y esta vez sólo citaron a Ayala para su selección. Tenemos quince días para seguir trabajando y mejorando para encarar la recta final del torneo y esperar que esta nos encuentre posicionados lo más arriba posible. Soñar no cuesta nada, por ahí quien les dice, en este fútbol argentino que es tan parejo pueda pasar cualquier cosa. Si esa cosa es que nos encontremos en lo más alto del campeonato sería un sueño hecho realidad. 

Diciembre cada vez está más cerca y eso conlleva la llegada del nueve, ese que todos idolatramos, aquel de los goles mágicos, ese que hoy cierta hinchada putea por no hacer goles, la misma que lo va a putear cuando después de diciembre se los haga. Sí, se avecinan buenos tiempos. Mientras tanto seguimos haciendo más difícil LA FORTALEZA!!!

P.D.: le digo pepe veni… y el salta y salta…