NO FUE PARÁMETRO
Si vamos a analizar el partido por la cancha, el rival y el resultado, en este momento estaría levantando el teléfono para llamar a Sabella y felicitarlo. Meterle tres pepas a Alemania y de visitante no es cosa de todos los días.
Pero mejor bajemos la excitación y analicemos un poco. El primer tiempo fue parejo, ambos equipos estuvieron cerca de lastimar. Argentina intentaba con el desequilibrio de los de arriba y Alemania abriendo la
cancha a espaldas de Di María y Sosa, y aprovechando el desorden de los laterales Zabaleta y Rojo. A esta paridad agreguemos que el local se quedó con un tipo menos en la primera etapa y que el gol que abrió el marcador fue por una burrada del alemán Khedira que la metió en su propia valla.
Ahora sí, con un tipo más y ganando por un regalito del anfitrión, convengamos que salir a jugar los últimos 45 minutos fue más sencillo. Sumemos que al rival le faltaban algunos titulares y que se trataba de un amistoso. En definitiva, con este panorama me cuesta tirar muchas flores y hacer un análisis muy exhaustivo del cotejo.
Es para destacar la actitud ofensiva que mostró el equipo, presionando bien arriba con los delanteros y los volantes. Lo más flojo fueron los carriles, como siempre. Y el doble cinco, con Masche y Gago anduvo mejor que nunca, aunque su mejor versión se vio tras la superioridad numérica, aprovechando los espacios que se generaban. Igual, como siempre repetimos en este espacio Bianchista, falta un armador natural que haga jugar a los volantes y que abastezca a los de arriba. No hubo, no hay y dudo que vaya a haber en la Selección de Sabella.
Con este contexto es muy poco lo que se puede destacar. Además se trataba de un amistoso, y si de amistosos hablamos, hasta la Argentina del Diego le ganó a Alemania hace un par de años.
Por lo menos así lo siento yo
ADELANTADO BIANCHISTA