El debut no
fue lo esperado. La multitud acompañó como siempre, pero el equipo nuevamente
no rindió, muchas fisuras en defensa, el mediocampo desarticulado (¿Hasta cuándo
Yacob?), un G10 que se prendía con la intermitencia de un Fiat 600 recalentado
y un delantero como Hauche que sigue jugando a los autitos chocadores. Encima jugábamos
con un rival que salió a jugar lo que se juega: su lugar en la Elite (¿?) del
fútbol nacional. Démonos por contentos: no perdimos de casualidad.
Lo bueno
muchachos: Es la primera fecha. No hay que sacarse el cartel de equipo favorito
y empezar a llevarlo con responsabilidad, no como los anteriores campeonatos
donde a estos mismos jugadores, la palabra CANDIDATO les pesaba como collar de
melones. El Coco tiene mucho material (tal vez de los mejores que tuvo Racing
en años), la base del equipo es la misma que con otros técnicos (Tanto te
cambio el Aleti?), los problemas diligenciales se acabaron y la gente como
siempre los va a apoyar.
Asumámoslo
de una vez por todas: Hay que hacerse el Coco, tenemos con qué.
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO ACADÉ