NOVEDADES

23 abril 2014

TROGLIO CHARLA CON DIOS


23 abril 2014

DIOS: Uh, ¡qué bárbaro este Jay Mammon! Le sale igual Franco De Vita. Menos mal que volvió “Tu cara me suena”. Ya lo extrañaba… Lo juro por Mí. ¡Qué bárbaro! ¡Excelso!... Uh, ¿otra vez el teléfono? No sé quién fue que le puso El Paraíso a este lugar pero conmigo le erraron fulero. ¿Hola?

TROGLIO: Hola… ¿Dios?

DIOS: No, Pablo Lunati.

TROGLIO: Uh, con vos tenía que hablar Pablo. ¡Qué casualidad! Aflojale al ayudín. Entiendo que seas gallina, pero…

DIOS: Soy Dios, querido. ¿Quién habla?

TROGLIO: Perdón Señor. Soy Pedro.

DIOS: ¡Peter! Tanto tiempo que no sé de vos. ¿Viste? Y vos que creías que ni Yo podía hacer que te levantes a Paula Chaves. Hoy ya sos papá. ¿Quién te ha visto y quién te ve? Eso sí: con esa jeta no me podés pedir más milagros de acá a tres vidas, eh.

TROGLIO: No, Señor. Soy Troglio.

DIOS: ¡Aníbal querido! Disculpeme, maestro. Yo de tango, cero. Ahora me metí con Agapornis y estoy a pleno con eso. ¿Pero usted no andaba por acá? Pensé que San Pedro me había dicho que estaba tocando en los arrabales del Paraíso. ¿Qué necesita?

TROGLIO: No Señor. Pedro Troglio, el DT de Gimnasia.

DIOS: Uh, pará, no digas esa palabra sin avisarme. Antes tengo que tocar una silla, un mueble, las piernas de Palermo, qué se yo, lo que tenga de madera al alcance… ya está, ahora sí… Antes que nada, dejame decirte que es mentira que ese presidente que tenían habló conmigo hace unos años como dijo. Me llamó, es cierto, pero no lo atendí. ¿Te acordás? Ese año que pelearon el torneo y… Bueno, y lo de siempre. Arrugaron más que camisa de tachero. ¿Quién te dio mi número, pibe?

TROGLIO: Me lo pasó Timoteo, Señor. Me dijo que él lo quiso usar en el 95 pero que Usted no le dio bolilla...

DIOS: ¿No le di bolilla? ¿Qué soy acaso, cuponera del Mundial? Hice lo que pude, Pedro. En ese entonces los teléfonos hacían más ruido que la rodilla de Milito. El viejo me dijo “quiero ver brillar a la cancha del Lobo” y Yo, con tanta interferencia en la línea, le entendí “quiero ver brillar a la Chancha con el Lobo”. Por eso lo de Mazzoni, qué va a ser. Errar es humano, ¿viste?

TROGLIO: Yo pensé que Usted era Divino…

DIOS: Gracias, Pedro. No seré Echarri o Arana pero me las rebusco…

TROGLIO: Nuestra historia está llena de imposibles, de cosas increíbles que nos suceden en contra. Siempre quedamos ahí nomás de la gloria.

DIOS: Lo más cerca que estuviste de la gloria fue cuando fuiste a jugar a la cancha de Instituto, Pedro. A mi no me mientas. Mirá que yo veo todo. Si ese equipo salía campeón con el Mono Navarro Montoya de arquero se venía otra que el tsunami en Indonesia.

TROGLIO: Pero teníamos buenos jugadores y un hambre bárbara. Nos merecíamos salir campeones.

DIOS: Coincido. Eran todos unos muertos de hambre. Y lo de buenos jugadores, con vos a la cabeza, no me extraña en lo más mínimo. Ahí sí que te doy la derecha. Bueno, decime, ¿qué necesitás, Pedrito? Metele que se me está pasando el cabello de ángel para meterle a la sopa.

TROGLIO: Bueno, Señor, yo lo llamaba porque como habrá visto, quedamos punteros y faltan nada más que cuatro fechas...

DIOS: ¿Gimnasia está puntero? No lo puedo creer. Dejo de ver el fútbol argentino por una semana y se arma un quilombo bárbaro. Uh… ya veo por donde viene el tema… ¿Querés que les dé una mano, no?

TROGLIO: Sí, Señor. Este equipo me hace acordar a aquel de 2005. Lo veo metido, lleno de pibes con un hambre de gloria increíble. Necesitamos esa puntada final.

DIOS: ¿Todavía tienen hambre?

TROGLIO: ¿Cómo todavía…?

DIOS: Claro, se comieron 7…

TROGLIO: No es gracioso, Señor.

DIOS: Chiste, Pedro.

TROGLIO: Daría cualquier cosa por mi primer título en Argentina. Es mi sueño. Y el de todo el pueblo de Gimnasia.

DIOS: Mirá, tengo amigos muy poderosos en la Universidad Católica. ¿Qué carrera te cierra? ¿Arquitecto? ¿Psicólogo? Yo te veo como un buen abogado. Chanta, mentiroso y vende humo. Das con el perfil exacto.

TROGLIO: Me refiero al fútbol, Señor. No sea malo. Quiero sacar a Gimnasia campeón.

DIOS: Y, mi viejo… Si ustedes salen campeones, acá se pudre todo. Yo también tengo jefes, eh. Eso de “Mandamás” es para la gilada. El verdadero Todopoderoso está en Viamonte, y yo en sus asuntos no me meto. Y él no sé qué tiene contra ustedes, pero le deben haber hecho algo muy malo alguna vez…

TROGLIO: Pero, Señor, ¿Usted qué puede hacer con nosotros?. Mire que nos queda un fixture fácil. Nadie sospecharía nada. Dénos una ayuda, ¡Por Usted se lo pido!

DIOS: Pedro, si querés salir campeón te doy un consejo: cambiate de equipo. Si te gusta la plata, probá con Estudiantes.

TROGLIO: ¡No, señor! ¿Qué me está diciendo? La Plata me encanta pero nunca podría cambiar de bando. Esos son amargos.

DIOS: Me refería a la biyuya. Si te gusta más la moneda que a Iúdica llorar en cámara.

TROGLIO: No fui claro. Estudiantes es moda.

DIOS: Y Gimnasia liquidación, Pedro.

TROGLIO: No me entiende. No tienen la pasión que tiene el Lobo.

DIOS: De pasión a mí no me podés hablar. Pasión tuvo mi pibe, y ya sabemos cómo terminó.

TROGLIO: Señor, dejemos estos temas de lado. Pasemos a lo importante: ¿puede ayudarme? Necesitamos de Usted más que nunca.

DIOS: Sí, y yo necesito que el Banco Celestial me apruebe el préstamo pero estoy más en deuda que Perotti. A ver… dejame pensar… ¿Qué puedo hacer por vos? ¡Ahí está! Hagamos una cosa, te va a costar… pero vos tenés que hacer todo lo que yo te diga.

TROGLIO: Sí, Señor, estoy anotando…

DIOS: ¿Sigue atajando Monetti, no?

TROGLIO: Sí, la está rompiendo. Es una de las figuras.

DIOS: ¿Y el muerto de Licht, sigue?

TROGLIO: Sí, capitán, emblema…

DIOS: Hacé una cosa, pero hacelo eh. Sacalos a los dos. Y poné línea de tres contra Argentinos. Olvidate de Boyero. No la va a tocar. Si hacés eso, el campeonato es de ustedes. No se les escapa.

TROGLIO: Pero, Señor, son los dos mejores jugadores que tengo. Además, ¿cambiar de esquema? ¿Que me olvide de Boyero en una cancha tan chica? ¿Está seguro?

DIOS: Vos dame bola a mí. ¿Quién es Dios acá?

TROGLIO: Tiene razón. Voy a hacer lo que Usted me diga. ¡Qué lindo! ¡Ya puedo saborear el campeonato! Sí sí señores, yo soy del Lobo, Sí sí señores de corazón…

DIOS: Me alegro Pedro. ¡Haceme caso, eh!

TROGLIO: Sí, Señor. ¡Muchas gracias! Hasta luego… Porque este año, desde La Plata, desde La Plata, salió nuevo campeón…

DIOS: ¡¡Chau, Pedro!!... ¿Ya cortó, no?... Sí... Ya festeja el campeonato. Estos no aprenden más. Como en el 95… Se ve que Timoteo no se quiso hacer cargo de aquella noche que hablamos, previo al partido contra Independiente. “Dejalo libre a Mazzoni, no le hace un gol a nadie. De locales no se les escapa”, y el viejo me creyó. Troglio también va a negar que habló conmigo. ¿Y qué querés que haga? A veces también puedo ser jodón… ¿no?
Share This :
 

Top