TIGRE 2 ARSENAL 1
Los que saben de turf cuentan que hace muchos años había un truco para evitar que el caballo rival ganara la carrera. Era una maniobra muy sencilla y económica, al alcance de cualquiera. Por eso, muchos dueños de equinos dormían al lado del animal y no lo descuidaban ni un minuto.
Esta tarde, al caballo del comisario —favorito en las apuestas de la carrera— un tigre sagaz se le acercó y le dio de tomar un balde de agua entero, que lo transformó en un animal pesado y sin ambición. Tal vez, esa maniobra cuasi mafiosa sea la única explicación: Arsenal rompió la lógica y no se llevó los 3 puntos.
Por lo menos así lo vemos nosotros.