TIGRE 3 - RACING 1
El médico confesó que es cuestión de horas. Son los últimos instantes de tu vida, y es un mal momento para darte cuenta que tus familiares son una cagada de gente. Perciben tu agonía e intentan garronearte algo. Tus hijos te sacan la clave de la caja fuerte. Tu cuñada insinúa que se quedará con el auto, ya que ninguno de los tuyos maneja. Tu mujer te dice que está llegando tu suegra, que tiene muchas ganas de verte.
El respirador no te permite putearlos. Entonces llega tu hija Victoria, la menor, tu debilidad, con el imbécil del novio. Victoria llora sinceramente. Él, finge estar conmovido. Pero cuando se dan vuelta y enfilan para la salida, tu yerno Pepe Sand gira la cabeza, te sonríe con soberbia y, mientras te señala el culo de tu hija, agita la pelvis una y otra vez, en el universal gesto de coger. Mientras te saluda burlonamente y cierra la puerta, entrás en paro.

Por lo menos así lo vemos nosotros.