Está claro que a Estudiantes le cuesta, el pincha está lejos de jugar bien. Los resultados sirven porque traen consigo tranquilidad para afrontar la semana. Esta calma necesaria genera un ambiente propicio para trabajar con menos barullo. El cuerpo técnico y los jugadores deberían aprovechar esta situación para seguir mejorando.
Por lo pronto, hay algunos cambios que ya se empiezan a ver en el equipo. Me quiero dentener en dos de la defensa. El primero es en las pelotas paradas en contra, gran enemigo para el pincha en estos últimos tiempos. El equipo se está parando en la línea del área grande con la intención de no tirarse tan atrás como lo hacía en la era Cagna. Esto permite dos cosas: por un lado, dejarle más espacio al arquero para que pueda salir a cortar y, por otro, evitar que los atacantes en caso de que conecten el balón lo hagan muy cerca del arco. El segundo es con los laterales. Se ve un intento de cambiarles el chip para que salgan más decididos al ataque y aparezcan por sorpresa para darle una variante de pase al volante. La vehemencia con la que salen disparados es algo nuevo. Quizás se vislumbre en este hecho una marca registrada del estilo de Pellegrino. Habrá que ver qué pasa con el tiempo.
Este ciclo recién comienza, por lo que resulta muy difícil juzgarlo. Se siguen cometiendo errores que se arrastran hace tiempo: los centrales revolean muchas pelotas sin sentido regalándosela al rival; los jugadores de buen pie tienen algunos errores en pases a menos de dos metros de distancia; falta asociación entre los atacantes para llegar con más gente a situación de gol; y muchos otros problemas que hacen al pobre presente de este equipo.
Todos estos inconvenientes no se podrán resolver de un día para el otro, hace falta tiempo. ¿Cuál es la solución? Hagámosnos algunas preguntas...
¿Alguien tiene alguna duda de que la victoria está en los detalles? ¿Alguien tiene alguna duda de que los equipos se arman de atrás para adelante? ¿Alguien tiene alguna duda de que nuestro porvenir como institución está en hacer fuertes los valores que predica nuestra escuela? Hoy más que nunca: humildad, trabajo y sacrificio... Hoy más que nunca: táctica, estrategia y laboratorio...
Hoy más que nunca: ¡Bidón o muerte!
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO PINCHA - @DrBidon
