Se vivió una semana inmejorable y el número 3 tuvo una fuerte participación por la seguidilla de acontecimientos entre martes y lunes.
Martes, debut en Copa Argentina ante Midland en cancha de Platense. El equipo medio muleto con varios que supieron ser titulares, se impuso 3 a 1 en un partido que desde mi punto de vista, no fue tan fácil como el resultado y los medios dicen. Sacándose de los ojos la venda de los colores de Quilmes y analizando, nos hicieron partido. Dulcich sacó cinco, sí, cinco jugadas imposibles y las diferencias más puntuales se notaron en los delanteros y, sin duda, el arquero, que mientras el nuestro sacó todo, el suyo se hizo solito el primer gol. Se jugó por momentos bien, pero el Decano transpiró de lo lindo en algunas partes del encuentro.
De buen humor por la levantada en la fecha anterior y el pase de ronda, se encaró el choque del lunes contra AAHN… perdón, eso sería de “hijos nuestros”. Retomo, el choque contra AAJG… perdón, eso es de “juntando gente”, se me mezclan las realidades con las siglas, pero es AAAJ: Asociación Atlética Argentinos Juniors, ahora sí (y muy juniors). Se sabía que ganando se salía de la zona del descenso por primera vez en mucho tiempo y el objetivo fijo fue ese, y ya que se jugó en una caja de zapatos, nada más adecuado que tres zapatazos para liquidar al Bicho. Dos conquistas desde casi mitad de cancha, primero Chirola aprovechando una mala salida del arquero y después Willy Olivera que se vistió de héroe con un fierrazo que no lo cree él, sus compañeros, nosotros los hinchas, el arquero que no lo vio… en fin, nadie; y un tiro libre perfecto de Jacobo, fueron los deleites que el hincha se merecía por ser local en La Paternal un lunes a las 21:10, y los golpes justos para un rival que viene en picada. Ojo igual, que cuando se pusieron 1-2, sufrí. Encima nos quedamos con 10 por la expulsión de Cobo que, aunque fue correcta, vino por una contra que no tenía que ser pero fue, gracias a que Lunati en vez de cobrar falta y expulsión al defensor local por último recurso, dejó seguir y amonestó a Elizari por protestar teniendo razón. Ya lo conocemos, si no es protagonista, no vale. No importó, fiesta y tranquilidad después de tanto.
En conclusión: tres goles de tres diferentes autores el martes; tres golazos de tres diferentes responsables el lunes; tercera victoria en el Torneo Final; tercer partido del campeonato en el que convertimos tres goles y, como si fuera poco, tres equipos por debajo en la tabla del descenso. El sábado nos visita justamente uno de ellos, el Diablo que arde en un infierno no tan apacible como el que desearía y que hay que saber contrarrestar con la cabeza fría.
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO CERVECERO - @adrian28qac