Ya ni a la historia podemos apelar para ganar un partido… El encuentro en el que todos deseábamos y pensábamos hacer valer la paternidad y ganar terminó en otra decepcionante derrota. Pizzi ahora dice que la situación es preocupante. ¿No lo era en su llagada tres fechas antes? Claro, en esos momentos quería hacer jugar al Ciclón al estilo Barça/Selección… Pasó lo que siempre. Flaqueza en el fondo y tibieza arriba. Cuando tu defensa se muestra insegura, más confianza agarran los delanteros rivales. En el caso de ayer fue Paredes, que sólo le bastó acertarle al arco para meter dos goles. Migliore hizo el resto. Pero mirando nuestra delantera, ¿cómo no reconocer el mérito de patear al arco? Digo al arco, el espacio delimitado por los palos y el travesaño. Jara pateó… a la tercera bandeja para que algún Cuervo se lleve de suvenir la pelota. Determinante diferencia y parte de la explicación. Jara, delantero que llegó como estrella y que se estrelló en el momento que pisó el club. Paredes, un juvenil que el técnico no ponía y que, presión mediante, justo vino a poner en este partido…
Con un punto cosechado desde que agarró, Pizzi corre el riesgo de quemarse antes de tiempo. Y ahí sí que no hay plan B. La apuesta era un cambio de estilo. Un juego más ofensivo que, a la luz de los resultados, fue en perjuicio de la relativa seguridad que atrás teníamos con Caruso. Muchos, entre los cuales me incluyo, criticábamos lo amarrete y mezquino de aquel equipo. Ahora se critica la falta de solidez, de a dos/tres goles que nos hacen por partido, son muchos los que tenemos que hacer nosotros para ganar. Y cada fecha que pasa, queda demostrado pobre que es el plantel. Sólo basta con decir que Bordagaray es nuestro recambio arriba. Del torneo pasado a este, San Lorenzo perdió al Pipi, a Bueno, a Gigliotti, a Salgueiro (viéndolo a Jara, cómo no extrañarlo…). Perdió calidad y más de 10 goles…
Así la situación es crítica. Creo que peor que la temporada pasada. La presión va a subir fecha a fecha si no se ganan dos o tres partidos seguidos, un milagro en estas épocas. Como fue Tigre, ahora es Independiente el rival a mirar. Todas pálidas en este presente. Nos queda la inminente vuelta a Av. De la Plata como fuente de inmensa esperanza y alegría. Ahí está la gente y se va a dar. El resto depende de lo que haga un equipo y un cuerpo técnico en la cancha...
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO CUERVO
