Noche de Luna llena: el Chino metió tres goles, y decretó el 3-1 de Tigre a Newell's. Los de Victoria están punteros con la Lepra y ojo, pueden salir hasta de Promo.
Desde el pizarrón del Vasco Arruabarrena; desde los pies, desde la cabeza, desde la ¡chi-le-na! de Luna. Desde la ilusión: Tigre le ganó 3-1 un partido durísimo a Newell's con todos los méritos, salió del descenso directo (mandó a San Martín de San Juan), pasó a San Lorenzo y a Rafaela (lo puede pasar o alcanzar) para no quedar ni en Promoción, y hasta se puso puntero en el Clausura.
Tigre sigue gritando que peleará con todo, contra todos. Con un once compacto que sabe a qué juega, que tiene puntos altísimos como Luna, como Morales, como Román Martínez. Con hasta pasajes de magia. Y casi mágicamente, ahí están los de Victoria: punteros, afuera del descenso directo, arriba de Olimpo, de San Martín, de San Lorenzo y de Atlético Rafaela. Y preparando el próximo truco.
Vieron, el destino no sabía con quién se metía. Un equipo valiente y digno. Que no pega, juega; que no demora, apura; que no retrocede, avanza; que no mezquina, ofrece; que no se rinde, insiste. E insiste. E insiste una vez más...
De taco. De pelota parada. De jugada preparada. De pillo. Tigre bailó al elenco de Gerardo Martino El conjunto de Zona Norte fue un equipo solidario. Esforzado en su conjunto. Y contundente, sobre todo. Fue el Tigre del que todos estamos tan orgullosos.
Desde el pizarrón del Vasco Arruabarrena; desde los pies, desde la cabeza, desde la ¡chi-le-na! de Luna. Desde la ilusión: Tigre le ganó 3-1 un partido durísimo a Newell's con todos los méritos, salió del descenso directo (mandó a San Martín de San Juan), pasó a San Lorenzo y a Rafaela (lo puede pasar o alcanzar) para no quedar ni en Promoción, y hasta se puso puntero en el Clausura.
Tigre sigue gritando que peleará con todo, contra todos. Con un once compacto que sabe a qué juega, que tiene puntos altísimos como Luna, como Morales, como Román Martínez. Con hasta pasajes de magia. Y casi mágicamente, ahí están los de Victoria: punteros, afuera del descenso directo, arriba de Olimpo, de San Martín, de San Lorenzo y de Atlético Rafaela. Y preparando el próximo truco.
Vieron, el destino no sabía con quién se metía. Un equipo valiente y digno. Que no pega, juega; que no demora, apura; que no retrocede, avanza; que no mezquina, ofrece; que no se rinde, insiste. E insiste. E insiste una vez más...
De taco. De pelota parada. De jugada preparada. De pillo. Tigre bailó al elenco de Gerardo Martino El conjunto de Zona Norte fue un equipo solidario. Esforzado en su conjunto. Y contundente, sobre todo. Fue el Tigre del que todos estamos tan orgullosos.
Este es el Tigre de Rodolfo Arruabarrena y sus muchachos, el que nunca se rinde ni aún vencido. Un ejemplo de lucha, que se demuestra a sí mismo que todos están unidos por un solo objetivo: quedarse en Primera. Así, en Victoria se vivió una noche a pura LUNA llena.
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO MATADOR
