Volvió la alegría. Volvió un estilo. Volvió el fútbol champagne a Rosario de la mano de su único equipo de primera: volvió a ganar Ñubel!

Ganar 4 partidos al hilo sonaba a misión imposible hace apenas un mes. En rigor, la llegada del Tata solo fue acompañada por dos refuerzos (defensivos) de poco vuelo: Víctor “Es fija que me amonestan” López y el colombiano Domínguez que mezcla banco y algunos minutos. No mucho más: el mismo equipo que el torneo pasado. Pero no. La contundencia
contra Colón y el asedio ofensivo (increíble) contra Rafaela y Vélez hacen inevitable hablar de un nuevo Ñubel.

Motivación, orden táctico y una idea de a qué estamos jugando son los tres pilares para esta lavada de cara marca Gerardo Martino, que en 8 fechas ya logró igual cantidad de porotos que en las 19 del apertura 20-11.

Con Ra-sin Club no se dominó el partido hasta después del primer gol. A partir del a 1 a 0 de Urruti, Newell´s se sintió más cómodo y comenzó a dominar al equipo de Basile hasta que Pablo Perez cerró el partido. Y lo bien que vino ese segundo gol, ya que la falta de puntería fue el mal mayor en los últimos partidos.

Increíble. Créalo o no, pero por un rato fuimos punteros. Si, el mismo equipo que hasta hace unas fechas no sabía para donde correr nos regaló (hasta ahora) un fútbol divertido del que parecía que nos habíamos olvidado. 

Aplaudan Señores, la Lepra está de vuelta.

Noti-Ascenso: Uno que no vuelve más es el Bentral de Juan Antonio que no tuvo huevo-huevo-huevo y perdió con el Bron de Giunta Blas. El canalla se aleja de la punta y se afianza en la B. 

Por lo menos así lo siento yo.

ADELANTADO LEPROSO