“RECUERDOS QUE NO VOY A OLVIDAR”
Se fue la octava fecha del torneo y se fueron dos puntos que estaban merecidamente casi ganados. Dentro de la mediocridad, pero siempre entretenido fútbol argentino, Colón está exactamente en la mitad de tabla con 10pts, a 7 del primero pero a 3 del último.
Como siempre, nos faltó ese pasito que determina el despegue que da confianza al equipo. Eso que hace a uno entrar a la cancha con la sensación que no va a perder, esas pequeñas cosas que consolidan grandes logros. Eso es lo que le falta a Colón desde hace mucho tiempo.
Como nunca, atacamos mucho (segundo tiempo) y
llegamos en varias ocasiones con claridad. Tanta veces le creamos ocasiones de gol, que hasta Leandro González infló la red sanjuanina. No es un dato menor, porque no creo que haya mojado con la roja y negra, y si lo hizo, pido perdón por tanta incredulidad. Pero, “no hace más que entrecerrar los ojos, para verte gambetear” (otra vez pido perdón, esta vez por parafrasear letras dirigidas al más grande) y no verte tropezar, o peor aún, entrecerrar los ojos y verte festejar un gol. Si lo hago, se me viene la imagen de un zapatazo de lejos con la camiseta de Olimpo o un festejo con la misma cara de felicidad que vi este domingo, pero con la camiseta gris del “pincha”. Solo son flashes que algunos les queda grabados, en mi caso podría haber sido porque mi subconsciente me vaticinó su llegada al club sabalero y su escases de goles. Y para no ser menos, otro que también debiera pedir perdón como yo tanta veces lo hice en esta nota, se encargó de referenciar el dato para aquellos que no hayan tenido mi misma sensación. Ahora sí todos se acordarán del gol de Leandro González, no porque sirviera para la victoria transitoria sino porque Pozo erró en la salida que derivó en el empate. El puesto es así, mil salvadas se borran por una cagada; pero no dudo que los aplausos volverán a escucharse cuando te acerques al arco de “los de siempre”.
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO SABALERO
