No se mejoró y no se ganó. Contra Merlo cerré diciendo que el árbol no tape el bosque… y en el bosque tenemos que ganar. Terminé con esa frase y justamente fue lo que pasó contra el “Lobo”, las individualidades no aparecieron y el juego colectivo tampoco. Aunque se había ganado no había gustado.Esta vez ni se goleó ni gustó. La construcción del juego hace varias fechas que es materia pendiente.
A River, todos los rivales le salen a jugar con un mínimo de 7 jugadores para “destruir” el juego. Eso ya lo sabemos. Almeyda lo sabe. Es lo que viene pasando, pero la clave es la forma de plantear los partidos. No todos los partidos se pueden pensar de la misma manera. Eso también es saber y jugar al futbol. River no juega solo. River tiene un rival, y eso me parece que se está dejando de lado. Hace rato que vengo pensando en esto y me baso en varios partidos que pareciera que los jugadores de River se ven sorprendidos por la forma en que juegan los equipos contrarios. No es lo mismo jugar contra un equipo que se para 4-4-2 que contra 4-2-3-1 o 5-3-2 o 4-4-1-1. No por el “numero de teléfono” si no por la característica de los jugadores.
Cuando a un equipo se lo hace ver videos de los contrarios, no es para saber qué resultados vienen teniendo, ni quiénes son los titulares, o si “ a este lo pongo en el Gran DT” o para saber de qué color es la casaca de Voka Unidos (ya que creo que más de la mitad del plantel y muchos de los lectores no tenían ni idea).
Es laburo saber si la pareja de centrales va bien de arriba, si juegan con laterales que pasan, si son los dos diestros o si el 3 es zurdo, si son tiradores de centros, si son centrales tirados a los costados, si es línea de 3 con stopper y libero o si es más bien una línea de 5 con laterales volantes y 3 centrales inamovibles. Para mí todo eso es trabajo. Saber que cuando los centros los tira X las pelota generalmente va al primer palo y cuando los patea Y van pasados. Si hay cortinas, jugadas preparadas (como los mil corners al primer palo de Defensa y Justicia). Saber que por ejemplo cabrera es un volante externo queriendo jugar de punta. Saber que Altobelli es un aguantador de pelotas. Saber que los 3 del fondo son ásperos, que Goux se pone una media de cada color y se caga a patadas él mismo. Y puedo seguir tirando ejemplos, nombrando jugadores o citando cosas que en mi opinión un jugador debe saber sobre el contrario antes de entrar a la cancha en mil líneas más.
En cambio, a River todos lo conocen. A River todos los equipos lo conocen. Todos los jugadores lo conocen. Saben que Trezeguet es un gigante cabeceador, por lo cual cada vez que salta tiene 2 tipos queriéndole hacer un hijo. Saben que el Chori es un volátil, por lo cual lo quieren sacar del partido. Que Cavenaghi si se da vuelta (le cuesta) es medio gol. Que Sánchez y Ocampos van, pero no vuelven mucho entonces le pueden comer la espalda. Saben que Ocampos la tira para adelante y les gana a todos. River es River. Es un Grande de Otra Categoría. Y todos saben quiénes son sus jugadores y conocen sus características y por los cual saben de lo que son capaces y esto les “saca sorpresa”.
En contraste, no creo que ninguno del equipo sepa con quien se va a encontrar en el partido. Preguntale a cualquier jugador del equipo si sabe quien es el que patea los penales en Atlanta. Preguntale a Vella o Díaz si sabe si De Blasis es diestro o zurdo y si lo desborda… tiende a enganchar o tirar centro de una. Con esto no quiero decir que River y Almeyda menosprecien al rival o que los jugadores subestimen a los contrarios.
River debe trabajar en todo sentido. No se puede dejar cosas libradas al azar. Los jugadores están y al Pelado lo banco. Falta estudio y laburo. Para ascender hay que ganar y para ganar hay que hacer la tarea.
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO MILLO
