CANTANDO BAJO LA LLUVIA
Hay que sentir el momento que vivimos los cuervos para entender la felicidad, descargo y fiesta que se vivió en La Paternal el sábado. En épocas en que las buenas noticias en San Lorenzo escasean más que la nafta súper antes de un fin de semana largo, haber ganado de visitante, después de varias fechas, deja felices todos por menos esta semana. Necesitábamos algo así. Lo sintieron los jugadores y la gente que terminó bailando en la tribuna mientras llovía.
Hay buenas cosas para rescatar. Botinelli volvió a defender como sabe, Champagne se recuperó del horror de la semana pasada y sacó una pelota de gol (lo que se le pide a un arquero gana partidos…), si bien no estuvo fino, tenemos en Bueno un delantero que siempre busca, exige y complica a las defensas. ¡Si hasta Gigliotti entró bien los últimos minutos! Lástima que no se pudo asegurar el resultado con un golcito más. Pero no nos pongamos exigentes. Se ganó y es lo que importa.
Muy buena forma de llegar al próximo partido con Boca. Seguramente, pesará la historia como suele pasar y habrá alegría en el Nuevo Gasómetro. Sí, ahora nos agrandamos, y ¿qué tiene de malo?
Esperemos que este sea el comienzo de una racha positiva. Hay que sumar y sumas. En especial mientas Tigre siga ganando. Pero bueno, dejemos a los cuervos tener tranquilidad una semana. Aunque seguramente, nuestros brillantes dirigentes y la excelente prensa deportiva que tenemos, alguna noticia amarilla se encargarán de generar en la semana. ¡Hay mucho espacio para rellenar en el fútbol-chimento de nuestros días!
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO CUERVO