Peratta 6

Schiavi 6

Fidelef 5

Machuca 3

Vella 4

Mateo 5

Bernardi 6,5

Vangioni 5

Formica 6

Sperdutti 5

Borghello 4

Arrancamos por el final: Minuto 90. El Tano Vella mete una de handball y penal para Quilmes. Un 1 a 1 incierto y toda la bronca leprosa. El invicto de once partidos pende de un hilo y Varela camina hacia el área para cambiar penal por gol y empate festejado por tres puntos regalados.

Sin Googlear: mientras los hinchas putean al aire se me viene a la cabeza un partido con San Lorenzo, en el Parque. También en el arco del Palomar. Fecha 15 Clausura 2005: La lepra venía con un invicto de 10 partidos o algo así. En tiempo adicionado (todavía no se hablaba de tiempo recuperado como le gusta a la TV Pública) penal para el Cuervo, también 1 a 1. Walter Montillo iba  hacia el mismo lugar que el pelado de Quilmes y el destino sería el mismo: Atajo Villar aquel día y mantuvo el invicto. Genio y Figura.

El sábado, Peratta se puso el overol y el traje de Superman en 90 minutos y abrazó el tirito del delantero de Quiles, abrazó el empate y abrazó la ovación. Es cierto, tuvo responsabilidad en el gol. Que tuya, que mía, nos vacunó Gerlo. Gerlo!!!! Si, Que milagro del fútbol!

El marcador lo había abierto el Gato y todos nos ilusionábamos con un trinufo más en esta dulce racha de los últimos tiempos.

En el segundo tiempo el nivel del equipo fue de los más flojito del torneo (salvo con el Rojo, creo que fue lo más flojo). Con poco y nada Quilmes nos complicó y lo tuvo en un par de oportunidades. Lo que venía siendo el punto más alto del equipo en el semestre, la defensa, se mostró floja y tuvo fisuras.

El empate fue justo. Casi lo perdemos sobre el final pero hubiera sido mucho castigo para un equipo que viene con un desgaste importante entre copa y campeonato.

Para lamentar la baja del Flaco, que ya estaba amonestado y se cruzó con un árbitro que quería salir en la tapa del diario. Amarilla más amarilla: afuera.

Mirando el vaso de cerveza medio lleno, este empate con Quilmes (que con poco nos tuvo contra las cuerdas) es un cachetazo a tiempo que nos pone los pies en la tierra. No somos el Manchester ni el Barca, pero tenemos huevos y vamos a dar pelea.