Engañó a todos por su ascendencia croata. Pero no nació en 1858 y se vino a vivir a Dolores en 1925. Tampoco se nacionalizó argentino, ni desarrolló un sistema de identificación de personas por sus huellas digitales. Nunca ingresó en 1888 al departamento central de la Policía de la Provincia de Buenos Aires. Engañó a todos. De hecho, tal vez ni siquiera sepa que en 1891 se hicieron las primeras fichas dactilares del mundo. Es probable que no tenga idea de que en 1907 la Academia de Ciencias de París informó públicamente que era el método más exacto conocido hasta el momento. Engañó a todos. Desconoce, es probable, que en 1892 se realizó por primera vez la identificación de una asesina por las huellas de sus dedos ensangrentados en la escena del crimen. Engañó a todos. Agustín Vuletich le choreó el gol y los 3 puntos al gordo Cambiasso. Se aprovechó de la fama de Juan Vucetich, ese buen tipo que siempre estuvo en contra de los robos.
Por lo menos así lo vemos nosotros.
