En una jugosísima entrevista, Horacio Pagani recibió a Un Metro Adelantado en la comodidad de su casa y habló de todo exponiendo claramente su forma de ser real, pasional y muy polémica.

En un recorrido por el fútbol local dejó frases interesantes como: “A Caruso Lombardi en el ambiente del fútbol no lo quiere nadie”. A quien contó que le propuso recorrer las calles para constatar quién era más querido entre ambos. También afirmó que lo que se dice de las ayudas a Arsenal por Julio Grondona “son todas pelotudeces”.

Hablando del Seleccionado Argentino no dudó en asegurar:

“No creo que Sabella llegue muy lejos en el Mundial”. Horacio definió al entrenador nacional como un “tacticista extremo” y concluyó en que “estamos en el tiempo de las dictaduras de los entrenadores”. Respecto al pasado Pagani lanzó: “Bilardo no le aportó nada al Seleccionado” y dijo que el mejor equipo fue el de César Menotti de 1978. Cerró ese capítulo con un polémico “en el 86, si Maradona jugaba para Dinamarca, salía campeón Dinamarca”.

Para definir a su gran referente futbolístico Pagani aseveró: “un Iniesta más un Xavi es un Riquelme” y criticando al juvenil de Boca tiró “Una docena de Chávez hacen un Riquelme”. En alusión al trunco paso de Román por el Barcelona, el histórico periodista de Clarín dijo “Yo creo que Van Gaal es otro gran pelotudo”. Y no dudó en marcar a Marcelo Gallardo como el antecesor del enganche xeneize. 

“Hay muchos periodistas imbéciles, sinvergüenzas y ciegos. A mí me gusta el Ruso Verea” reconoció Horacio evitando hablar de sus colegas. Luego afirmó que “Cappa es un fundamentalista pero es mentira que mandó al descenso a River, Huracán y Gimnasia”. Y, por otro lado, ajustició “La era de La Volpe fue el papelón más grande de la historia de Boca”.

Sobre el final de la entrevista el columnista de Estudio Fútbol dejó frases como: “El Barcelona le dio el triunfo al menotismo sobre el bilardismo”; “Si fuera D.T. primero contrataría a Iniesta por sobre Messi”; y “Soy 75% real y 25% personaje”.

CAMPEONATO Y COPA

- ¿Cómo explica el campeonato de Arsenal? Teniendo en cuenta que es un club con una envergadura tan pequeña ¿Cómo se explica que un equipo tan chico llegue a un logro tan importante?

Los campeonatos son cortitos, 19 fechas, y los protagonistas, los grandes, están todos fuera del protagonismo menos Boca. San Lorenzo, Independiente, Racing están fuera del gran protagonismo. Se ha igualado mucho el fútbol argentino porque se han ido los jugadores más importantes que son generalmente de los clubes grandes y éstos han quedado debilitados. En estas circunstancias, cualquiera puede ser campeón, como fue campeón Lanús y Banfield, que fue record mundial. Con el promedio del título de campeón se fue al descenso directo.

Digamos que esa es una parte buena del fútbol argentino, que está tan variado; comparado con el campeonato español que siempre ganan los mismos. Acá hay chances para todos, pero esta posibilidad te la dan los campeonatos cortos.

- ¿Cuál fue el equipo que más le gustó de este campeonato? Más allá del que salió campeón.

Boca jugó bien algunos partidos, es el equipo con más oficio de todos. Tigre era el equipo que mejores intenciones tenía, y con la carga de tratar de salir de la zona de descenso, llegaron a estar primeros. Y tiene algunos bueno jugadores, como Román Martínez. Arsenal también tiene buenos jugadores, muy buena pareja de centrales, es un equipo más armado para contraatacar. Tigre tiene más decisión ofensiva, Román Martínez, el Chino Luna, Cachete Morales. Son los equipos que terminaron arriba de todo, en definitiva.

- Usted puede decir entonces que Arsenal ganó en buena ley el campeonato...

Si, para mí sí. Es sanata eso de que es el equipo de Grondona, que se le murió la mujer, son todas pelotudeces. Por ahí hay una ligera idea de los árbitros, pero no creo en todos los fantasmas que inventan los periodistas.

- ¿Cree que es posible que un equipo logre el torneo local y la Libertadores?

Boca estuvo cerquita, había sacado una pequeña ventaja y luego lo pasaron. Para mi gusto, los dos puntos (lo sigo diciendo y me joden en la tele) que perdió con Rafaela fueron decisivos. Yo dije: “acá perdió el campeonato Boca”. Si a estos partidos hubiese llegado con 4 puntos de ventaja, podía ganar los dos torneos. Aunque perdiera con Banfield o Arsenal, después el último partido lo podía ganar. Le falto tener 2 o 3 puntos más. También tiene que jugar la final de la Copa Argentina… en cualquier momento no gana nada. Si llegás a sacar una pequeña diferencia llegando a la última fecha, mientras estas jugando las finales y tenés un colchoncito de puntos puede ser, pero todavía no ocurrió nunca.

- Usted dijo que el Boca de Falcioni no le gustaba, pero por otro lado dijo que, como había sacado 12 puntos, tampoco se lo podía discutir. La pregunta es ¿a veces el resultado es más importante que el cómo?

Un resultado circunstancial no, pero cuando los resultado son muchos, ¿desde dónde lo atacamos? ¿desde qué argumento puedo atacar a un equipo que sacó 12 puntos de ventaja al segundo? Vos decís: “bueno, son todos malos”, pero juegan este campeonato. Cuando la diferencia es tan grande es demasiado pretencioso y soberbio decir que no te gusta el equipo. Además Boca lo tiene a Riquelme, que jugando como jugara, tiene por lo menos la posibilidad de generar juego, que no la tienen los otros equipos.

RIQUELME

- Hablando de Riquelme, ¿Por qué piensa que no triunfó en Europa?

- Usted ha dicho que Riquelme es el último enganche ¿Esta convencido que la posición va a desaparecer?

Y, la están destruyendo. El otro día hablamos con Gallardo en la tele… para mí Gallardo era el antecesor de Riquelme y dijo que en muchísimos años no iba a aparecer un jugador en Argentina como Riquelme. Para mí no es que no aparecen, sino que los matan en las divisiones inferiores. Estamos en el tiempo de la dictadura de los entrenadores que, para salvarse, buscan el resultado de cualquier manera y lo empiezan a hacer en las juveniles. Por eso Sabella, que es un tacticista extremo, no lo pone en la selección. Por la misma razón que no lo puso Bielsa. Son entrenadores que se creen más importantes que los jugadores.

- Sin Riquelme en la selección, ¿cree que puede llegar lejos en este mundial?

Yo creo que no porque todavía no se sabe cómo juega el equipo. Se hacen variantes según el rival, se ponen 3, 4 defensores y hasta se fue a jugar a Venezuela con 5. Además no tiene un generador de juego. A Riquelme, Sabella no lo va a llamar, porque él cree que poniendo tres delanteros esta dando una demostración de fútbol ofensivo, y un equipo que juega con tres delanteros sin un generador de juego en el medio no juega a nada, juega a tirar pelotazos a los de arriba y a la inventiva de Messi o de Agüero, o algún acierto de Higuaín ¿Quién les provee el juego? ¿Braña? ¿Di María?, es muy difícil. Vamos a ver…

- En sus años de profesión y también como espectador de fútbol, ¿qué jugador vio mejor que Riquelme? Tal vez en otro momento o en otro país.

Al único que vi mejor que Riquelme es a Maradona y cuando tuvo su esplendor, Zidane. A mí me gustan los jugadores que son conceptualistas. Jugadores habilidosos vi millones, Houseman, Corbatta, jugadores extraordinarios o goleadores como Kempes. Tengo 45 años de periodista y hace 50, más, 60 años que veo fútbol, he visto de todas las categorías. Vi a Rubén Paz de Racing, a Sívori antes que se fuera, a Labruna. He visto grandes jugadores, pero tipos que manejen los hilos como Román, te puedo decir Zidane, los del Barcelona actual; Plantini o Cruyff, no creo que haya otros….

- Cuando usted está sentado en esos pupitres en la cancha de Boca, ¿qué le genera? ¿qué es para usted, que es un hombre asociado a los sentimientos y que no oculta demasiado, un pase de Riquelme entre líneas hacia los delanteros?

Me parece fenomenal. Les digo a los muchachos que van conmigo que no se fijen en las jugadas importantes, en los pases gol, sino que se fijen en las jugadas intrascendentes, cuando él devuelve la pelota y va armando la idea, para ver por dónde va a entrar el equipo. El tipo está siempre un tiempo adelante de los otros y los boludos dicen que es un pecho frío, que juega para atrás. Un tipo que dice que Riquelme es lento no entiende que la que tiene que correr es la pelota. Pero bueno, estamos rodeados de muchachos que no entienden nada.

- ¿Qué piensa del alejamiento de Boca en las últimas horas?

Hace poquito vino a comer con nosotros Román con Viatri. Estuvimos charlando un rato, y en un momento, le pregunté ¿te vas a ir a China? Estaba con Coco Basile y Román dijo a China no, pero Flamengo me anda buscando. En Argentina debe haber 6 o 7 tipos que cumplen lo que dicen, yo soy uno de ellos, y le dije a Román que creía que él estaba entre ellos también. Le recordé que dijo que firmaba un contrato por 4 años, que quería terminar su carrera en Boca, que era bostero ¿y ahora te vas a ir?. Me imagino que no te vas a ir le dije, que vas a cumplir con tu palabra. Y me dijo que uno a veces puede cambiar de opinión. Román odia a Falcioni, está claro. Para mí sería una cosa terrible que no juegue más en Boca, pero por él lo digo, le van a tirar misiles de todo tipo.

SELECCIÓN

- Pasando a la Selección ¿Cuál fue el mejor seleccionado argentino que vio?

La de Menotti por supuesto. La que dirigió Coco Basile, que estuvo 33 partidos sin perder, la del Sudamericano en Chile también. La de Pekerman con Román no estuvo mal y la de Coco que jugó la Copa America de Venezuela, tampoco. Tenía a Messi, a Verón y a Román, había jugado unos partidos bárbaros pero tuvo la desgracia del último partido, pero era un equipo que jugaba bien. En el Mundial de Alemania cuando Román se retiró de la cancha, el equipo estaba clasificado para semifinales y frente al local, que no es poco.

Pekerman se equivocó como un pelotudo al sacarlo, pero por lo menos al tipo no le preocupaba que Riquelme manejara el equipo adentro de la cancha, no era un técnico celoso como son algunos. Tampoco es celoso Coco que es vivo, ni Russo que no es ningún boludo. Los técnicos tienen problemas cuando se creen que son más importantes que lo jugadores.

- No lo queremos pinchar, pero ¿la del ´86?

En el ´86, si Maradona jugaba para Dinamarca, el campeón era Dinamarca, si jugaba en España, el campeón era España, es cierto que el equipo terminó acomodándose, algunos jugadores terminaron jugando bien como Burruchaga, Valdano… pero el desequilibrio total era de Maradona.

- A grandes rasgos ¿cuál fue el aporte más importante del Menotismo y del Bilardismo al fútbol argentino?

El Menotismo le cambió la cara al fútbol argentino. La llegada de Menoti significó volver a las fuentes: jugar con el estilo Argentino pero bien preparado, porque para poder competir contra los europeos, tenés que hacerlo con tus propias armas. Con nuestras características, pero también agregándole táctica y preparación, ¿no? Sin dar ventaja física, sin dar ventaja de desconocer a los rivales y con algún respaldo táctico, porque tampoco era solamente la inventiva de los jugadores. Si querés copiar al resto, como hizo Bielsa, tenés más posibilidades de perder que de ganar.

Eso aportó Menotti, yo creo que le cambió la cara al futbol argentino, hizo respetar a la Selección. Hasta que llegara Menotti, los jugadores no querían jugar.

En cambio Bilardo no aportó nada, él lo que intentó demostrar es que vale ganar de cualquier manera. ¿Cuál es la línea futbolera de Bilardo? Todo eso de 5 defensores, la táctica, son cosas secundarias. Yo siempre digo, los técnicos se dividen en conceptualistas y tacticistas. La táctica existe siempre, lo que vale es la importancia que se le dá a la misma: si vos sos conceptualista, primero tenés en cuenta la capacidad de tus jugadores y luego le adoptás la táctica; si sos tacticista, para vos está primero la táctica y después tomás los jugadores para adaptarlos a tu táctica. Esa es la diferencia central, y bueno, Bilardo fue la imagen exacta del tacticista.

Bilardo tuvo mucha suerte, llegó 2 veces a la final del mundo. El equipo del 90 era impresentable y llegó a una final, con los palos, con Goycochea atajando penales, un verdadero milagro y la gente se acuerda que llegó a la final; el baile que nos pegó Brasil fue inolvidable parecía mentira que la pelota no entrara.

- Bueno un bidoncito ayudó… ¿no?

Y también eso, el bidón, que al rival hay que pisarlo, todas cuestiones que aunque ganemos 5 copas del mundo no voy a estar de acuerdo, no promulgo ese estilo de juego.

- Habiendo visto lo que le pasó a Basile en la selección. ¿Usted cree que los jugadores pueden llegar a voltear a un técnico?

En los equipos es más difícil que uno juegue contra sus propios intereses, que un jugador resuelva rendir menos para perjudicar al técnico. Pero en la selección puede pasar. Yo creo que a Basile le hicieron la cama; con el “Coco” ceno 2 veces por semana, y es un tipo tan cerrado que nunca nos contó los motivos por los cuales se fue. Nos contaron los allegados a él. Riquelme se fue de la selección por eso más que por las declaraciones de Maradona. Basile y su cuerpo técnico creen que hubo una cama en la que participó Diego, y que se gestó en los Juegos Olímpicos, cuando Batista estuvo como DT.

- ¿Y La Volpe en Boca y esa final recordada con Estudiantes?

Lo de La Volpe fue distinto, cometió un grandísimo error. Cuando tomó Boca, el equipo tenía quince puntos en las cinco primeras fechas, venía al galope corto. Le trató de cambiar la fisionomía al equipo de entrada nomás. ¡Un loco! El equipo se incomodó, los jugadores no estaban a gusto con él; además de las condiciones técnicas que tenga un jugador, es vital el ambiente en el cual se mueve y desarrolla.

Boca perdió un partido que tenía que empatar con Lanús para ser campeón en su cancha. Eso no tiene perdón, fue el papelón más grande de la historia de Boca.

ESTILOS/TÁCTICA/ENTRENADORES

- Después de ver jugar a España, ¿cómo hace para sentarse a ver el fútbol argentino?

(Risas) Bueno es difícil, mientras se jugaba la final entre España e Italia, estaban jugando la segunda promoción acá, Rosario Central y San Martín de San Juan. Primero traté de hacer un poco de zapping y después me quede con el partido de España y no vi más el otro. Se hace difícil, solamente miro la cancha y es clara la diferencia. (Risas).

- ¿Qué puede pensar Guardiola de un Caruso Lombardi?

(Risas) Caruso Lombardi… ¿Vieron que tuve un entredicho con Caruso estos días? Salió a decir que con otro técnico San Lorenzo perdía 4 a 0 el partido ese con Instituto y después salió a decir que lo habían editado, pero realmente eso lo dijo. Y buenamente le quise dar un consejo, le dije: “no tenés que hacer esas declaraciones, porque quedas como un soberbio y te ganás la antipatía de los colegas, de los técnicos”, y me dijo: “¿y vos te crees que a vos te quiere todo el mundo?” Yo le dije “si si, pero yo laburo de periodista. En realidad a vos no te quiere nadie en el ambiente del fútbol” (risas).

Al día siguiente vino a la tele. Hablamos y me volvió a decir lo mismo: “¿vos te pensas que a vos te quiere todo el mundo?, a vos te odian más que a mí”. Entonces le dije: “mirá Ricardo, nosotros podemos salir a competir en la calle a ver a quién quieren más, y te voy a decir lo siguiente, si yo te gano 6 a 4 ganás vos, si yo te gano 7 a 3 ganás vos, recién paso a ganarte cuando estamos 8 a 2 a mi favor” (risas), me puse serio. Y me dijo: “bueno ¿por dónde empezamos?”… y le dije: “por Quilmes, ahí te quiere mucho la gente (risas)”, y afuera del aire me decía “vamos a La Plata a ver quién gana”.

- Se habrá enterado que Cappa asumió, en San Martín de Porres en Perú ¿A qué atribuye sus últimos fracasos acá en el fútbol argentino?

Aunque no le fue bien, decir que mandó al descenso a River, Gimnasia y Huracán es un tanto mala leche. Ángel es fundamentalista, o sea es peor que yo. Él cree en la idea y que la misma se puede desarrollar con cualquier jugador, y esto no es así. Le fue bien en Huracán, armó bien el equipo, tuvo la suerte que explotó Pastore, fijate lo que es Defederico que hoy no existe, y Bolatti que jugó bárbaro y después nunca más pudo volver a ser titular en ningún lado. A veces en el futbol se juntan algunos jugadores y se da, así fue, y debería haber sido campeón. Ese equipo representaba verdaderamente el fútbol que le gusta a la gente. En River no le fue tan mal como se dice pero no le fue bien… y en Gimnasia agarró un equipo de puro calentón, por ser la contra de Estudiantes, sin saber qué carajo de jugadores tenía.

A mí me gusta mucho lo que propone, aunque sea fundamentalista. Peor que Menotti en ese sentido, mucho más extremo, más dogmático.

- ¿Y ese Huracán fue el último equipo por el cual valía la pena pagar una entrada?

Si, el último equipo que jugaba verdaderamente bien, hay equipos que juegan bien pero que no son tan lucidos. Vélez tuvo una muy buena etapa últimamente, pero no es un equipo de tanto lucimiento en el juego, como Lanús que tuvo un momento de cierto esplendor.

- Pasando a los equipos más defensivos o de la vereda de enfrente, conocidos como Bilardistas digamos, ¿cuál cree que fue la causa de formación de los mismos? ¿El asumirse menos que el rival antes de cuenta?

El tema es que los entrenadores quieren mantener su puesto de cualquier manera, entonces se abroquelan atrás, jugando defensivamente, tratando de acertar con algún contraataque.

Fijate que Tigre por el camino inverso casi gana el campeonato y se salvó de todo cuando estaba mil puntos abajo al cominezo. Si bien no era el Barcelona, tratando de jugar pudo llegar a posicionarse bien arriba. Esto debe ser una moraleja para los equipos que creen que a partir de la táctica y de los cerrojos defensivos se puede conseguir el éxito.

- Hablando de la pelota parada, ¿Usted considera a la pelota parada un arma fundamental? ¿O no debería tenerse en cuenta?

Es un elemento más. Siempre se cuentan los goles de pelota parada, pero nunca veo la estadística de todos los que no se hacen, incluso los que patea Riquelme. En un partido, donde Román tiene 12 tiros libres, sea desde la izquierda, derecha, o centro, y es gol, digo: “mirá, que bárbaro donde se la puso”, pero hay once donde no pasa nada. Cuando se haga la estadística verdadera de todos los que se intentan, cuales son efectivos y cuales no, ahí sí. Lo que pasa ahora es que como no hay habilidades, no hay inteligencia para generar situaciones, pasa a ser más importante esto. Es un recurso, pero que no tiene la importancia fundamental. Si un equipo trabaja más en pelota parada que en generar juego está jodido.

- ¿El Barcelona le dio el triunfo al Menotismo por sobre el Bilardismo?

Sin dudas. El Barcelona después de tantos años, es el ejemplo del juego que nosotros venimos pregonando. Los de la contra decían que después del efímero paso de Huracán nos habíamos quedado sin ejemplos.

Es una guerra ideológica que antes se podía llamar Menottismo y Bilardismo, y que ahora yo lo llamo conceptualismo y tacticismo. Quedó demostrado con el Barcelona, que con todo lo que nosotros pregonamos: con el buen juego, la posesión de pelota, el toque, la cuestión estética, es decir, con el estilo de Menotti, también se puede ganar. Esto no quiere decir que no tengan disposición táctica, que no sepan defenderse.

- Ahora que tantos equipos juegan a no dejar espacios, a correr, de una forma cada vez más física, ¿se imagina o le parecería bueno que los partidos se jueguen con 10 hombres, o que se juegue en una cancha más grande?

Yo creo que la cancha está bien, la pelota está bien, están todos bien. Lo que pasa es que se corre mucho, hay mucha infracción, mucha fricción. Se corre más de lo que se piensa. Hay entrenadores que dicen: “el que no corre, conmigo no juega”. Es muy difícil que un entrenador diga: “el que no juega, conmigo no juega”. Para los entrenadores está primero correr y después tratar de ver si juegan bien; y así es como se afean todos los espectáculos. Los tipos corren como locos por todos lados y nadie hace una pausa. Todo lo contrario a lo que hacen en el Barcelona, ¿no?

Hoy existen dos tendencias en los entrenadores claramente definidas. Una vez Passarella, en una fiesta de Clarín me dice: “¿Sabés que estuve pensando? Vos decís que “el menottismo y el bilardismo”… ¿Me podés explicar cuál es la diferencia entre una cosa y otra?”. Y le dije: “Mirá te voy a decir algo. Cuando vos estás en la charla previa, antes de empezar el partido, ¿quién pensás que va a tener principalmente la pelota? ¿Tu equipo o el equipo contrario? Si vos, cuando estás pensando y armando la estrategia para el partido, pensás que la pelota la vas a tener vos más que el contrario, sos Menotti. Si creés que la pelota la va a tener más el contrario y vos se la tenés que sacar, sos Bilardo”. “A mi, ni una cosa ni la otra” me contestó. “A veces me gusta tenerla y a veces me gusta jugar de contra”… “Está muy bien Daniel, vos no sos ni Menotti, ni Bilardo, no sos nada” (risas).

- ¿Quién es el mejor periodista deportivo después de Horacio Pagani?

No no, no me hagas hablar (risas). No me hagas hablar de los colegas. De fútbol si, específicamente de fútbol… Puedo nombrarte al Ruso Verea, que me gusta pero tampoco es ni la Biblia ni el calefón. Habla de una manera pintoresca. Pero no, pongamos… “hay varios buenos, y algunos madera”. Niembro es un desastre, que tiene confundidos a todos. Es el líder de la contra.

El otro día estaba jugando Boca, y Riquelme estaba un poco cansado. Y preguntó Niembro: “Está Chávez en el banco, ¿no?”, al gordo, a Tití. A los 5 minutos ¡por segunda vez pregunta si estaba Chávez en el banco! ¿Cómo va a preguntar un tipo por segunda vez, si ya se lo dijeron? Además el tipo sabe quiénes son los suplentes. Lo decía intencionadamente, pero no se atrevía a decir “tiene que salir Riquelme y entrar Chávez”. No se atrevía. Cuando lo dijo por tercera vez… fui al día siguiente y lo maté en la tele.

¿Vos viste lo que es Chávez? Una docena de Chávez hacen un Riquelme, ¡pero una docena! Chávez es un jugador que es más o menos habilidoso, pero cero inteligente para jugar. Lo mismo que Mouche: Mouche es un jugador no-inteligente, que por ahí gambetea y te hace un gol, tira un centro. Pero imposible querer comparar a Chávez con Riquelme, imposible.

Un tipo que dice, como Pasman, que Boca juega mejor con Chávez que con Riquelme, es un tipo que tiene los ojos de adorno, son ciegos y no entienden de qué se trata el juego del fútbol. Porque vos lo ves a Chávez dos partidos y te das cuenta. Decís: “que vivo, que bien este tipo, la trae de afuera, gambetea”… ¡es un ciego! ¡No sabe jugar!

Román una vez, cuando filmamos la publicidad, aquella famosa, Me decía de Mouche: “No sabe jugar. Si estoy en la cancha y tengo que darle la pelota, ¿para dónde tiene que picar? *así (encarando hacia el arco). No, este pica para el banderín del córner. ¡Se va para el banderín del córner! Después necesita tres movimientos para seguir la jugada”.

Y es eso, Mouche está pasando por un muy buen momento. Pero así haga goles y todo, ¡sigue siendo un burro! ¿No viste cuando está mano a mano con el arquero? ¡Esencial Pablito!, cuando estás frente al arquero, ¡amagá primero! ¡No podés tirarle al cuerpo!, esto es el ABC del fútbol. No amaga nunca, le patea al cuerpo.

- ¿Por qué cree que hoy en día se habla más de Caruso que del fútbol?

Todo se ha banalizado. El periodismo se ha banalizado. El otro día, cuando San Lorenzo zafó después de tanto tiempo y tanto quilombo, ¿cuál fue la tapa de Olé? La cara de Caruso y el colorado ese que ponían de ranking-mufa (risas).

Yo le dije a Farinella: “por lo menos Clarín y La Nación fueron más serios; pusieron a algunos jugadores de San Lorenzo, con la camiseta de San Lorenzo”. Bueno, los tipos de Olé creen que de esa manera venden más. Para mí venden menos. Pero ellos están convencidos de que hay que vender quilombo y sanata y que se yo.

LAS ADELANTADAS

- Si fuera técnico, ¿primero lo contrataría a Messi o a Iniesta?

Mmm… ah, qué cagada (risas). A Messi, si Messi. Pero después es necesario que inmediatamente tenga a alguno, Iniesta, Riquelme o Xavi, ¿no?

- ¿Pero primero lo contrata a Messi?

Y, es el tipo que te desequilibra. Hizo 5000 goles.

- Nos sorprendió…

Si, a mí también, me sorprendí a mi mismo (risas). ¿Pero sabés qué pasa? Quiero ser sincero con la situación. Un equipo necesita a Iniesta, pero necesita a un Messi también. Y necesita un Riquelme y necesita un Messi. Si vos me decís Riquelme o Messi, no me queda más remedio que decir Riquelme, porque lo defiendo hace 500 años. Bueno, hemos hecho esta apuesta con Recondo, cuando todavía no había tenido esta explosión Messi. Le dije: “Lo elijo primero a Riquelme, después si tengo chances, lo elijo a Messi“. “No, lo elijo yo a Messi” (Recondo), “Bueno, entonces elijo a otro, a Agüero” (risas). Digamos… No, mejor poneme a Iniesta primero ( risas).

- Total después alguien hace el gol, ¿no? Palermo con sus limitaciones hizo 20 mil…

Claaaro, mirá… ¿Te acordás el día del gol récord de Palermo, que Riquelme le negó el saludo? Que era gol de él y se la cedió. Y el otro lo fue a buscar para festejar y este se fue, ¿no?

Ese día me habló por teléfono Román y me dijo: “lo que pasa es que en mi barrio, al que se saluda es al que crea el gol. La empuja cualquiera a la pelota ¿Cuál es el mérito de un tipo que empuja la pelota abajo del arco? Él me tenía que venir a abrazar a mí.” Y le dije: “¡Fue, pero no le diste bola!”.

Esteee… y, Román es así. “En mi barrio, al que se felicita es al tipo que propone el gol, después los goles los hace cualquiera” ¿Sabés quién decía eso también? Rivaldo. Rivaldo decía: “El gol lo hace cualquiera, lo importante es crear la situación para el gol”.

- ¿La reacción de Román no fue por un tema relacionado a la Barra?

No, pero... yo digo que de todas maneras los dos se odiaban… Lo que pasa es que Román es más vivo que Palermo y nunca dijo nada públicamente. Siempre dijo: “tenemos los dos mejores delanteros del país: Palacio y Palermo”, “Palermo es un goleador”, “Cómo lo va a extrañar Boca a Palermo cuando se retire”; y este pelotudo en cualquier momento hablaba de la relación y de que tenían problemas. Román nunca hizo una frase pública. Tiene códigos, absolutamente tiene códigos.

- ¿Qué podría ser peor? ¿Tener una charla de fútbol con La Volpe o ver un partido de Bilardo?

¿Qué es peor? Ver un partido de Bilardo, si. Con Lavolpe se puede charlar, hablar de fútbol. Te peleás pero se puede charlar.

- ¿Y con Arévalo también?

No, Arévalo no. (risas)

- De su participación en Estudio Fútbol Horacio, ¿cuánto es real (que por lo que vemos es bastante), y cuánto es un personaje?

Yo digo que un 75% real y otro 25% es un poco de circo.

- Si lo tiene que comparar a Riquelme con una mujer... ¿Qué mujer sería?

Mmm… Sophia Loren.

- Final del mundo: ¿Si tuviera qué elegir entre sólo estas dos situaciones? (una u otra) ¿Cuál escogería? – Jugar excelente, dar una cátedra de fútbol, con tiki tiki, pero tener la mala fortuna de perder. – Jugar horrible, de contragolpe, tirando la pelota para arriba, pero metiendo un gol con la mano en el último minuto y ganando injustamente.

Esa es una pregunta capciosa, no hay elección. Todo el mundo juega para ganar. Ganar es lo principal. Un día estaba hablando mano a mano con Niembro, y me dice: “Porque a mí me gusta ganar”, y le contesto: “y a mí me gusta respirar”. Me contesta: “Eh, ¿me estás cargando?”, y le dije: “No, vos me estás cargando a mí”. La frase la tomó Menotti y después el propio Valdano que la puso en su libro. “Y a mi me gusta respirar”… Entonces le sigo diciendo: “¿Cómo vas a hacer de una obviedad una bandera? A mí también me gusta ganar”, principalmente ganar. Lo que nosotros tenemos que discutir es: cómo hacemos para ganar. Qué métodos empleamos para tratar de ganar… Nadie tiene asegurado el éxito, ni el triunfo. A mí me interesa ganar. Yo prefiero que Argentina sea campeón del mundo, claro… Los avatares de que si la cosa fue de pedo o no, yo lo digo. Como fue el mundial del ’90. Que fue una vergüenza el equipo que llegó a la final. Pero bueno, llegó a la final. Y si no le daban el penal a Alemania, Argentina campeón del mundo por segunda vez.

Entonces, nos teníamos que suicidar y tirar abajo del océano porque, ¿viste lo que jugaba ese equipo? Entonces, lo importante es ganar… a ver, claro, yo digo esto en la tele y todos los boludos que están conmigo dicen “este cambió, ahora es resultadista”… Lo que no se entiende es la filosofía de la cuestión: Yo discuto, cómo se juega al fútbol ¿Ganar? ¡Por supuesto! Todos queremos ganar, sino no competiríamos…

En definitiva, a mí me interesa que se gane jugando bien, porque jugando bien es cuando más fácil podés ganar. De pedo, ganás cualquier partido.

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