En el
día de hoy, el ex jugador de fútbol y actual Director de Resonancia
Magnética del Hospital Finochietto de Avellaneda, Dr. Gabriel Milito, será
galardonado por la AAOT (Asociación Argentina de Ortopedia y Traumatología), tras su reciente descubrimiento sobre lesiones ligamentarias.
Todo
comenzó cuando en una mañana de invierno, ya retirado del deporte, Gabi fue al
supermercado chino de la vuelta de su casa a comprar un kilo de peceto para
que su mujer hiciera milanesas. Llegando al sector de las heladeras, el ex defensor frenó de golpe su caminata para analizar una tentadora oferta. En ese instante, el ex jugador sintió un crack en sus dos rodillas, que se quedaron clavadas en el piso del supermercado. La rotura ligamentaria en ambas piernas le hizo perder estabilidad y en la desesperación de la caída, al querer manotear algo para no perder el equilibrio, se sujetó de un pollo con la mala fortuna de sostenerlo de una de sus “alitas”. Ya desparramado en el suelo, con la “alita” en la mano, tuvo su momento de inspiración.
que su mujer hiciera milanesas. Llegando al sector de las heladeras, el ex defensor frenó de golpe su caminata para analizar una tentadora oferta. En ese instante, el ex jugador sintió un crack en sus dos rodillas, que se quedaron clavadas en el piso del supermercado. La rotura ligamentaria en ambas piernas le hizo perder estabilidad y en la desesperación de la caída, al querer manotear algo para no perder el equilibrio, se sujetó de un pollo con la mala fortuna de sostenerlo de una de sus “alitas”. Ya desparramado en el suelo, con la “alita” en la mano, tuvo su momento de inspiración.
Ante
los reclamos de su mujer, que le recriminaba que pasaba más tiempo en el quirófano
que con sus hijos, Gabriel decidió que era momento de hacer algo nuevo. Los
injertos importados no resultaban, y no tuvo mejor idea que utilizar esa “alita”
de pollo para probar el gran experimento. Junto con su amigo y colega, el Dr. Sebastián Battaglia, Director del Depratamento de Fisioterapia, llevaron a cabo el revolucionario descubrimiento. Estamos hablando del "Bypass Ligamentario", método por el cual se injerta una alita de pollo que suplanta al ligamento roto y el jugador puede volver a las canchas en tan solo 4 semanas.
Más allá de su trayectoria intachable en la medicina, Gabriel estaría evaluando la posibilidad de volver a jugar al fútbol luego de los siete bypass que se aplicó en las rodillas. De todas maneras, el Dr. Milito no descarta continuar con los estudios médicos, ya que en este momento se encuentra trabajando en un implante para solucionar su otro gran problema, la displasia de cadera.
Desde este humilde espacio, queremos felicitar a Gabriel y a todo su equipo médico por su gran aporte a la medicina.
Desde este humilde espacio, queremos felicitar a Gabriel y a todo su equipo médico por su gran aporte a la medicina.