DOMINGO DE GLORIA
Domingo 20 de mayo. Fecha 34 de esta novela sin fin en la que se ha convertido el torneo. Una vez más nuestra gran amiga AFA nos hace madrugar (y no será la última) para asistir a ver a Instituto enfrentarse al siempre duro, rocoso y molesto Almirante Brown de Giunta.
La gran inquietud era saber qué partido íbamos a ver por parte de Instituto y cuánto había afectado en los jugadores todo lo sucedido en la semana previa, para colmo de males el inicio mismo no era nada alentador.
Con la ilusión de ganar, alcanzar a River y acercarse a Central, y esperando una actitud aguerrida de los jugadores para obtener los puntos, no tardó mucho en aparecer la desesperanza, al ver cómo todas las ilusiones empezaban a desvanecerse en tan poco tiempo; y es que los actores principales salieron tan dormidos o tan desconcentrados que el balde de agua fría cayó en apenas 9 minutos de juego, 1 a 0 abajo y la película de otras épocas conocidas apareció en las mentes de los hinchas, Instituto seguía en el túnel que entró desde hace un par de fechas y aún no se veía la luz del otro lado.
Todo el primer tiempo iba transcurriendo en el medio de una nada intranquila, una parte de la hinchada (pequeña parte de no hinchas en realidad) empezó a cantar canciones agresivas contra los jugadores y ese fue el momento donde el resto de la hinchada, hinchas reales, salió de su estado de conmoción, reaccionó contra los insultos de los pocos y empezó a alentar, alentar de verdad. Ése fue el click que necesitaban los jugadores, que entendieron que se les estaba yendo el último tren sin correrlo. A partir de ahí creció Instituto, no tanto desde el juego pero si desde la voluntad, y sobre el final del primer tiempo, como supo decir el hombre de La Rosa: cuando nada pasaba, de la nada misma llegó la luz que se buscaba, un gran pase de Dybala dejó a Encina gritando el gol que al resto del equipo le devolvía la tranquilidad y a la gente la esperanza. Del segundo tiempo está casi de más expresarse, con ánimo renovado y actitud ganadora Instituto salió realmente a ganar y por decantación llegaron los goles que borraron todo lo malo de la semana y mostraron, por fin, la luz del otro lado del túnel.
La fecha que viene no es menos complicada, pero asumiendo y sobre todo ilusionándose por una nueva victoria de Instituto, la pregunta pasa a ser cuál es el resultado más conveniente entre River y Central. Y es que ganando Central nos alejaríamos a 3 de River con 9 en juego, aunque también es cierto que Central estaría prácticamente ascendido y en un mano a mano entre River e Instituto por el 2° ascenso pasamos a depender exclusivamente de la billetera de River y la voluntad de AFA en las fechas finales. El empate o victoria de River nos acerca a la punta pero amontona más en puntos entre los 3, y esto no nos permitiría ni un mínimo tropezón más. Lo único cierto es que primero deberemos ganar nosotros nuestro partido en Mendoza, esperemos que la luz acompañe a la Gloria.
PD: Un aplauso para Franco que esta vez aunque no lo diga, usó el plan B; y por primera vez en la temporada entendí los cambios.
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO GLORIOSO.
