Diez
fechas tuvimos que esperar… Casi tres meses de sufrimiento, angustia y mucho
dolor por ver al club de nuestros amores caer partido tras partido…
Dicen
que siempre que llovió…paró. Pero este temporal amagaba con no terminar nunca. Estamos
transitando por una realidad ya conocida. Hemos vivido momentos como estos. Lamentablemente
podemos decir que: en cuestiones de descenso tenemos experiencia. Pero a pesar
de tener esa experiencia, esta realidad DUELE. Dos fechas sin participar de
este blog, dos fechas sin ganas de sentarme a escribir. ¿Estaba escondido? No,
estaba asimilando este momento, digiriendo esta bronca.
Que
puedo decir del partido…fuimos contundentes. Lejos todavía del nivel que
podemos llegar a tener, lo cierto es que lastimamos cuando hacía falta, dos
llegadas de Bareiro fueron suficientes para quedarnos con los tres puntos
frente a un rival que tampoco mereció más que esto.
Hoy comienza, una nueva etapa. Es momento de comenzar a afilar la punta
del lápiz y prepararnos para lo que se viene. Si bien aún quedan chances
matemáticas y la esperanza de un milagro, creo que la prioridad es armar la
base del equipo que deberá luchar por un nuevo ascenso.
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO AURINGERO