¿Qué queda esperar cuando un equipo no encuentra su
juego colectivo?...Alguna individualidad que marque el camino.
¿Qué queda esperar cuando esa individualidad no aparece?...Actitud.
¿Qué queda esperar cuando la actitud y el ánimo del
plantel tocó fondo?...Suerte
¿Qué queda esperar cuando ni siquiera la suerte
acompaña?...RESIGNACIÓN.
Una nueva derrota, una nueva desilusión y mucho dolor
por este presente. La única ilusión de este hincha es que termine pronto
el campeonato.
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO AURINEGRO