COPADO
En una nueva mágica noche de Copa, River ha dado un nuevo trascendental, clave e importantísimo paso. Venció por 2 a 1 al Quilmes Athletic Club y se clasificó a los cuartos de final de la competición internacional.
En ocasiones como ésta, plagadas de emoción y mística, es imposible no recordar la gloria alcanzada en 1986 y 1996.
El conjunto dirigido por Matías Almeyda llegaba a San Juan tras haber superado al Sportivo Belgrano en Octavos de Final, en otra serie inolvidable
para el pueblo Millonario. En esta oportunidad, Quilmes era el escollo, que venía un tanto convulsionado por la ida de su serio y prestigioso entrenador a un club del exterior...
para el pueblo Millonario. En esta oportunidad, Quilmes era el escollo, que venía un tanto convulsionado por la ida de su serio y prestigioso entrenador a un club del exterior...
Como todos sabemos, la Copa es muy difícil, no es para cualquiera. No obstante, River pisó firme en un reducto complicadísimo, como el mítico "Bicentenario de San Juan", y en media hora ya ganaba por 2 a 0. En ese momento exacto, qué riverplatense no recordó aquella inigualable final del 96 de idéntico resultado ante América de Cali, con aquel golazo de Crespito.
Esta vez, se vestirían de héroes el fenomenal David Trezeguet (que vino al país a cumplir su sueño de jugar La Copa) y el sorprendente Keko Villalva. Con el correr del cronómetro, los de Almeyda se movieron con la jerarquía que lo vienen haciendo en la competición continental y solo sufrió un ínfimo traspié sobre el final de la primera etapa, cuando descontó Cauteruccio.
Ahora bien, lo que viene, en Cuartos de Final, se definirá en la llave entre Saint Lorenzo y Céntral Barracas, pero eso no es preocupación para el Millo, porque la banda está copada y la gloria, nuevamente, está muy cerca.
... Por su parte, los vecinos avanzan en la doméstica y humilde Copa Argentina. ¡Suerte Boquita!
