DESPERTAR
Se acabaron las vacaciones, pasó la pretemporada en Tandil, los entrenamientos al límite con jugadores extenuados. Pasaron los torneos de verano, Mardel, Mendoza, victorias, victorias y más victorias. Pasaron las compras, el desfile de nombres, las sanatas de la prensa y las novelas interminables.
Falcioni tomó la batuta y sorprendió a propios y extraños, el tipo está en todo: diseñó la pretemporada más dura de los últimos tiempos (según los dichos de los players), se quedó sin crédito en el celular de tanto llamar a Erviti para que venga a Boca, sigue persiguiendo a los dirigentes para sacarles algún refuerzo más, llenó de confianza a los jugadores que había en el club y que tenían los días contados (caso Mouche, Calvo, Monzón y Colazo entre otros), bancó a los históricos y practica hasta los laterales porque entiende que “no debe quedar ningún detalle librado al azar”.
Nosotros, los hinchas, los apasionados por estos colores tenemos un único deseo: ganar los próximos 19 domingos y así poder dar la vuelta, clasificar a las copas y revalidar el mote de mejor equipo americano de la década que nos acaban de adjudicar.
Parafraseando a un canoso Virrey podríamos decir que hace dos años que Boca está durmiendo la siesta, le dio la posibilidad a otros equipos de ganar algo (lamentablemente algunos rivales con plumas no la supieron aprovechar), pero el domingo la mitad mas uno del país va a gritar con el alma esperando que el gigante se despierte y la Bombonera vuelva a latir, como siempre, como nunca…
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO XENEIZE
