VOLVIÓ GIMNASIA

El sábado en el Nuevo Gasómetro se vio a un Mellizo original: inteligente ante todo y tan simple como complejo al momento de jugar al fútbol. Guillermo Barros Schelloto es un jugador enorme que más allá de su acto de grandeza con el club que lo vio nacer, aún demuestra virtudes únicas.
No tiene sentido hablar de un penal. Al Gimnasia de la primera fecha no lo define un disparo desde los doce pasos porque antes de esgrimir un juicio con una jugada que un estadio entero ni siquiera puso en cuestión en el momento, hay que pensar qué hizo este equipo para llevarse un punto de visitante.
Bueno, lo que demostró Gimnasia el sábado fue una mezcla de un sin fin de errores y aciertos que dejaron en claro un merecido resultado. Es verdad, San Lorenzo pudo liquidar el partido en el primer tiempo pero también pudo perderlo en el segundo. El empate fue lo más justo.
Todo pero absolutamente todo lo que hizo el Lobo estuvo sostenido en tres jugadores: el Mellizo (el mejor del partido), Gastón Sessa con dos intervenciones determinantes y Fabián Rinaudo con una entrega impresionante.
Este Lobo asume riesgos, va para adelante y se descuida pero estoy cansado de los que piensan que poniendo defensores un equipo se salva del descenso. Antes nos ocupábamos de cuidar un cero sin sentido y hoy es estamos peor que nunca.
Quizás el punto del sábado cobre su real magnitud hacia el final del torneo pero queda la sensación que algo cambió o al menos está empezando a cambiar. Espero que así sea.
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO TRIPERO
Por lo menos así lo siento yo.
ADELANTADO TRIPERO