Pensar que el partido se llevó a cabo en una localidad justamente llamada Victoria, cosa que ni Tigre ni Racing fueron a buscar este domingo.
Tanto Caruso Lombardi como Miguel Russo nos dieron una verdadera demostración de mediocridad.
Del primero, la verdad no sorprende. Independientemente de que algunos les guste y a otros no tanto, el entrenador del Matador hizo una carrera en base a la solidez defensiva y escasa audacia en ataque.
Por su parte, el DT de la Acadé está mostrando una extraña faceta de medianía. Hecho que la parcialidad de Avellaneda le está haciendo notar a través de reiterados reclamos e insultos.
Poco y nada para decir de este cotejo. Un punto para cada uno fue demasiado premio para dos planteos que solo buscaron destruir lo insignificante que ofrecía el rival.
Tanto Caruso Lombardi como Miguel Russo nos dieron una verdadera demostración de mediocridad.
Del primero, la verdad no sorprende. Independientemente de que algunos les guste y a otros no tanto, el entrenador del Matador hizo una carrera en base a la solidez defensiva y escasa audacia en ataque.
Por su parte, el DT de la Acadé está mostrando una extraña faceta de medianía. Hecho que la parcialidad de Avellaneda le está haciendo notar a través de reiterados reclamos e insultos.
Poco y nada para decir de este cotejo. Un punto para cada uno fue demasiado premio para dos planteos que solo buscaron destruir lo insignificante que ofrecía el rival.
Por lo menos así lo vemos nosotros
GI
